RECHAZO A LOS RECORTES
La reforma de la PAC contempla una reducción de las ayudas del 5%, según la primera propuesta de la Comisión Europea
La Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG) considera inaceptable el recorte del 5% en el presupuesto de la Política Agraria Común (PAC) anunciado por la Comisión Europea en la propuesta de perspectivas financieras comunitaria para 2021-2027. Si tenemos en cuenta la inflación a lo largo de todo el periodo presupuestario (estimada por la CE en el 2% anual), el recorte anunciado supondría una pérdida real del 16,6% de las ayudas que perciben los agricultores, tal y como refleja el análisis comparativo elaborado por los Servicios Técnicos de COAG.
Madrid - Publicado el - Actualizado
1 min lectura
Asimismo, COAG considera que el marco presupuestario presentado es a todas luces insuficiente para abordar las nuevas exigencias, compromisos y retos planteados en la comunicación de la Comisión Europea sobre el futuro de la PAC, la alimentación y la agricultura tras 2020. “Resulta contradictorio e incoherente que para dar respuesta a las principales demandas de los ciudadanos europeos (lucha contra el cambio climático, seguridad alimentaria, conservación del medio ambiente, economía circular, desarrollo del medio rural), la UE proponga una nueva reducción del apoyo comunitario a las agricultores y ganaderos. La implementación de las nuevas medidas supondría mayores costes en las explotaciones agrarias y por lo tanto se hace más necesario que nunca una mayor dotación presupuestaria para mantener la viabilidad de las pequeñas y medianas explotaciones”, ha subrayado Miguel Blanco, Secretario General de COAG.
Además, COAG critica que en un contexto de recortes no se plantean medidas de priorización de las ayudas en favor de los verdaderos activos agrarios, hombres y mujeres del campo que trabajan directamente en la explotación, generan empleo y fijan población en el medio rural, y no haya elementos novedosos de apoyo a la incorporación de jóvenes al sector agrario. “Y no sólo eso: teniendo en cuenta que el 80% de los ingresos de las explotaciones se generan vía precios, en la comunicación de la reforma de la PAC no se establecen medidas de regulación de los mercados, defensa de la preferencia comunitaria y protección de los parámetros de calidad y seguridad alimentaria del modelo de producción europeo frente a importaciones. Al contrario, se ahonda en mayor liberalización con acuerdos de libre comercio con terceros países para facilitar la entrada de empresas mercantiles y fondos inversión ajenos al sector que acaban desplazando a los verdaderos agricultores y ganaderos profesionales”, ha lamentado Blanco.