Ad líbitum, con Javier Pereda

Hoy: Conmoción

Redacción COPE Jaén

Jaén - Publicado el

4 min lectura

      
      
             
      

Seguimos en shock desde que el pasado viernes 13 de diciembre, los medios digitales anunciaran la moción de censura del Partido Socialista y de Jaén Merece Más, en el Ayuntamiento de Jaén. Aunque resulta prematuro un diagnóstico definitivo sobre dicha actuación política, ya hemos oído a las partes implicadas en los distintos medios de comunicación, lo que lleva a realizar unas primeras valoraciones. Esta moción de censura, la segunda que se realiza en esta Corporación municipal, desde que en 1989 AP y CDS apartaran a un alcalde socialista, ha causado tal conmoción que hasta los medios de comunicación nacionales se han hecho eco. Jaén ha sido noticia por este terremoto político, que, de aprobarse finalmente, desbancará al actual Equipo de Gobierno del PP, generando inestabilidad política, social e institucional. Después de un año y medio de mandato, con proyectos conjuntos en marcha para la legislatura, se desvanecen todos los esfuerzos. La medida adoptada no admite reproche alguno de legalidad. Me comentaba ayer por la tarde un concejal afectado que así es la política. Pero habría que distinguir entre la legalidad y la legitimidad de esta medida. Se plantean serias dudas sobre su conveniencia y la legitimidad-moralidad en favor del bien común de la mayoría de los ciudadanos. Hay que analizar si existen motivos razonables y con suficiente entidad para realizar este cambio de Gobierno municipal, o si por el contrario se trata de una cuestión personal; si no existían otras fórmulas menos lesivas, intereses partidistas aparte, para todos los jiennenses. Los proyectos de los partidos necesitan tiempo; hay que dejarles trabajar, salvo situaciones graves y justificadas, al menos durante el ejercicio de su mandato. La aparición del partido político JM+, que surgió como un movimiento vecinal reivindicativo, tuvo una notable aceptación social e incluso llegó a tener representación en la provincia. Los partidos políticos expresan el pluralismo político y concurren a la formación y manifestación de la voluntad popular. El bipartidismo, tan asentado en las democracias

más antiguas del mundo, sin embargo, tienen una consideración diferente en otras sociedades, cuya participación popular está formada por múltiples formaciones. Esto sucede en la sede de la soberanía de la nación de nuestro país, que cuenta con nueve grupos parlamentarios distintos. La aparición de este partido local (como Teruel Existe), supuso una bocanada de aire fresco y de esperanza, ante el abandono histórico que experimenta nuestra ciudad. Durante más de cuarenta años, en el régimen democrático de 1978, se han repartido la alcaldía entre socialistas y populares, 22 años cada uno, no siempre con mayorías absolutas, como la actual coalición PP-JM+. Para ser justos, la responsabilidad de la situación económica de quiebra técnica del Ayuntamiento de Jaén, habría que repartirla, en principio y a expensas de una rigurosa auditoría, por partes iguales. Este inconformismo ayudó a que surgiera con fuerza (tres concejales nada menos) de este partido local y provincial, cuyo nombre representa toda una declaración programática: Jaén Merece Más. Pero su importante protagonismo, decisorio para conformar gobiernos y mayorías, supone una gran responsabilidad, que la ciudadanía les demandará. Decisiones estratégicas erradas han acabado con partidos emergentes como Ciudadanos o UPyD. La apuesta que JM+ ha lanzado a la ciudadanía jiennense ha sido muy arriesgada: la gloria si consiguen las exigentes demandas o la inanidad si yerran en el envite. Algunos han criticado a este partido de comportarse como los chantajistas de Junts, ERC, PNV o Bildu. La sociedad jiennense no está para ensayos ni probatinas como en la serie danesa Borgen o en Juego de Tronos. JM+ tiene que ser consciente que los problemas no se solucionan con fórmulas mágicas, porque eso se llama populismo; que tan nocivo es el conformismo como las exigencias desmesuradas e imposibles. La deslealtad con sus socios le ha llevado a la incoherente moción de censura contra sí mismos, porque podían haberse situado en la oposición. JM+ vino como solución y remedio, pero no para convertirse en un justiciero que, en vez de arreglar los problemas, los

agudice. JM+ confía más en el Gobierno de Sánchez y Montero que en la Junta de Andalucía de Moreno. Allá ellos. A JM+ le puede ocurrir como en algunas bodas, que los invitados apuestan cuánto tiempo durará el próximo compromiso amoroso. Es cuestión de esperar para saberlo. Pero siguiendo el proverbio: quien a hierro mata, a hierro muere.