Cerca de 3 millones de españoles padecen de osteoporosis

Es más que probable que en alguna ocasión hayas oído hablar de la osteoporosis, una enfermedad sistémica y crónica que se caracteriza por la pérdida progresiva de masa ósea y un deterioro de la microarquitectura del tejido de nuestros huesos provocando que estos sean más débiles y por lo tanto, más propensos a las fracturas. Por lo general, las fracturas osteoporóticas o por fragilidad se producen con mayor incidencia en vértebras, cadera y muñecas y suponen una causa importante de morbilidad y mortalidad en las personas que la padecen.

Según la Asociación Española contra la Osteoporosis, en España hay más de tres millones de personas que padecen esta enfermedad asociada principalmente a personas mayores de 55 años, con especial foco en las mujeres. En concreto, el 22,5% de las mujeres y el 6,8% de los hombres mayores de 50 años tienen osteoporosis, lo que provoca alrededor de 330.000 fracturas por fragilidad al año. Para que te hagas una idea, el 90% de fracturas de cadera que se producen después de los 50 años son por culpa de esta enfermedad.

Se calcula que la osteoporosis afecta a 200 millones de personas en todo el mundo y provoca una fractura cada 3 segundos; sin embargo, una nueva encuesta revela que los traumatólogos europeos consideran que su impacto no está realmente reconocido.

La mayoría de los especialistas (el 82%) cree que la osteoporosis es una epidemia silenciosa; sin embargo, solo el 24% opina que su sistema de atención sanitaria está debidamente preparado para dar apoyo a los pacientes con osteoporosis.

Síntomas

La osteoporosis no produce síntomas hasta que se produce una fractura por fragilidad. Estas dolorosas fracturas, no solo se producen por caídas o golpes, ya que también suelen producirse en el transcurso de la vida cotidiana al realizar movimientos bruscos o esfuerzos.

Prevención

Apostar por una dieta equilibrada y rica en nutrientes como el calcio, la vitamina D, K o el silicio, ayudarán a la salud de tus huesos, articulaciones y cartílago.

La práctica periódica de ejercicio físico es beneficiosa para pacientes con osteoporosis.

a diario, siempre bajo la supervisión de un especialista, tienen un efecto beneficioso en la masa ósea, la fuerza muscular, el equilibrio, la estabilidad postural y la prevención de caída también. En concreto, caminar al aire libre, además de evitar el sedentarismo, potencia la absorción de vitamina D, esencial para nuestros huesos.

Esto, sumado a malos hábitos como el tabaquismo o el consumo de alcohol en exceso, pueden ser factores de riesgo que conlleven al desarrollo de osteoporosis.