Tan comunes como difíciles de detectar por las víctimas: estas conductas también son violencia de género

Petri, Bianca, Gracia, Ana y una quinta mujer cuyo nombre desconocemos, han sido asesinadas este año en la provincia de Málaga por sus parejas o exparejas. Cinco víctimas de la violencia machista en este 2024, el peor año en Málaga desde que en 2009 se comenzaron a recabar datos sobre estos crímenes.

Afortunadamente, hay mujeres que consiguen escapar a tiempo de las garras de la violencia de género. Es el caso de Montse. Cuando estaba a punto de cumplir los 30 años conoció a un hombre. Ella venía de pasar un bache emocional y se enamoró. Al poco tiempo se fueron a vivir juntos y llegó el primer hijo en común. 

A partir de ahí, el carácter de su pareja comenzó a cambiar, pero ella no le dio importancia: “No le gustaba que yo fuera a casa de mis padres porque decía que me estaban comiendo la cabeza. Ya no me dejaba ponerme falda corta y si me pintaba me preguntaba que a dónde iba”. Montse se sentía cada vez más aislada socialmente y, con la llegada de dos hijos más, el hombre del que se enamoró se volvió más agresivo y violento.

AMENAZA DE MUERTE

Ella ya contemplaba la posibilidad de marcharse de casa, pero la idea de no tener donde ir con sus tres hijos pequeños la retenían. Pronto, Montse vivió una situación que supuso un punto de inflexión: “Durante tres días que me tuvo encerrada en casa me llego a amenazar con un cuchillo y me dijo que si salía de allí sería con los pies por delante”, asegura en COPE.

Fue entonces cuando cogió a sus tres hijos y dio el paso; Montse se marchó a una casa de acogida donde permaneció seis meses. Allí recibió la atención que necesitaba para dejar atrás una relación que se convirtió en una pesadilla. Aunque fue una época difícil, Montse asegura que mereció la pena porque ahora es libre.

CRECE LA ATENCIÓN A MUJERES

En los primeros diez meses del año, el teléfono de atención del Instituto Andaluz de la Mujer, ha atendido en Málaga casi 9.500 llamadas relacionadas con la violencia de género, esto supone un incremento de casi el 18 por ciento con respecto al mismo periodo de 2023. 

Actualmente, la línea 900 200 999 recibe una media de 31 llamadas al día. Pero no todas las mujeres se atreven a dar el paso de pedir ayuda o denunciar. A veces por miedo; otras simplemente porque no son conscientes de que están siendo víctimas de la violencia de género: “Ellas no se identifican como víctimas o normalizan situaciones que no son las que deberían ser. El simple hecho de que tu marido te controle las cuentas, te dé el dinero justo para la compra o que sea él el que tenga tu DNI, es violencia de género”.

PROTECCIÓN

La violencia no siempre es física. Es lo que nos cuenta en COPE, José María Jiménez, subinspector de la Unidad de Atención a la Familia y Mujer de la Policía Nacional en Málaga, unos agentes que se encargan de gestionar denuncias por violencia de género y velar por la seguridad de las víctimas a través del Grupo de Protección, que actúa según el riesgo para la víctima. En caso de nivel extremo, sería una protección integral para la mujer: “Se le acompañaría en todo momento e incluso tendría una radiopatrulla junto a su domicilio”.