Dos policías locales de Málaga evitan que un hombre se quite la vida

Dos agentes de la Policía Local de Málaga han impedido que un hombre se quitara la vida. Los hechos han tenido lugar la noche del sábado al domingo a las 02:45 horas de la madrugada. Se dirigían a la avenida Santiago Ramón y Cajal donde habían recibido un aviso por un accidente de tráfico con heridos. Poco antes de llegar al lugar de la colisión, los agentes fueron sorprendidos por un grupo de jóvenes que se encontraban muy nerviosos. Les informaron de que había un hombre que pretendía arrojarse por un puente cercano con una cuerda amarrada al cuello.

Los agentes acudieron de inmediato al lugar de los hechos a pie y comprobaron que el relato de los jóvenes era cierto. El hombre tenía la cuerda atada y estaba haciendo un nudo para engancharlo a una barandilla. Uno de los policías locales se abalanzó sobre él y lo inmovilizó mientras su compañero se encargó de deshacer el nudo. Intentaron tranquilizar al hombre y le acompañaron a bajar la pasarela en la que se encontraba. Allí le esperaba un equipo del 061 que se encargó de trasladarlo a un centro hospitalario. El hombre se mostró muy agradecido tanto con los agentes como con los sanitarios que le atendieron posteriormente.

EL ACCIDENTE

Finalmente fue otra unidad de la Policía Local de Málaga la que se encargó de atender a los heridos. La colisión entre dos coches tuvo lugar en el número 23 de la avenida Santiago Ramón y Cajal. Una vez que los agentes llegaron al lugar de los hechos, observaron que el siniestro se había producido por el alcance de un vehículo a otro. Los dos coches se encontraban en mitad de la vía y uno de ellos tenía diversos daños, entre ellos las marcas de una valla con la que había colisionado. El conductor tiene 22 años e iba acompañado de otras dos jóvenes de su misma edad. Todos presentaban lesiones de carácter leve y fueron trasladados a un centro hospitalario en ambulancia.

En cuanto al conductor del otro coche, se trata de un hombre de 30 años que presentaba signos de encontrarse bajo los efectos del alcohol. Por ello, fue trasladado a las dependencias del Grupo de Investigación de Accidentes y Atestados (GIAA) de la Policía Local de Málaga para someterse a la correspondiente prueba de alcoholemia en la que dio positivo. Se le acusa de un presunto delito contra la seguridad vial por conducir un vehículo a motor bajo la influencia de bebidas alcohólicas.