¿Por qué llevamos veinticinco años usando una planta tóxica como barrera natural en autopistas y autovías?: “Fue la primera en nacer tras la bomba de Hiroshima”

Cuando termines de leer este artículo probablemente pienses que necesitas esta planta en tu vida, ya sea para sembrarla en tu jardín o para poner una maceta en tu lugar de trabajo. Es capaz de resistir al viento más fuerte, a la lluvia torrencial, a la sequía, al calor extremo… no es de extrañar que sea, incluso, un nombre de mujer.

Probablemente no hayas reparado en ella, pero cada vez que viajas por autovía o autopista, esa planta está presente. Te ponemos un ejemplo viajando por la red viaria de la sexta provincia más habitada de España: Málaga.

¿Sabías que Málaga cuenta con 442 kilómetros de autovías y autopistas?

Málaga, conocida por ser la provincia que está de moda para vivir y teletrabajar, también destaca por su infraestructura vial, que abarca 442 kilómetros de autovías y autopistas. Esto significa que, si alineáramos esos kilómetros en línea recta, podríamos viajar desde Málaga hasta Toledo o hacer un recorrido de ida y vuelta a Sevilla. De esos 442 kilómetros, 350 pertenecen al Estado y los 92 restantes son gestionados por la Junta de Andalucía, según datos oficiales a los que ha tenido acceso COPE. 

Pero, ¿te has preguntado alguna vez qué contribuye a la belleza y seguridad de estas vías? Una planta destaca en la escena: la adelfa (Nerium oleander). No solo en Málaga, sino en muchas otras carreteras de España, Francia y Portugal, esta planta ha sido el aliado natural para proteger nuestras carreteras. ¿Por qué es tan popular? ¿Qué características la convierten en una elección esencial para la mediana de nuestras autovías?

La adelfa: la resistente protectora de nuestras carreteras

Para entender el papel fundamental de la adelfa, el profesor Enrique Salvo Tierra, botánico y docente en la Universidad de Málaga, ha desglosado sus cualidades en una entrevista en ‘Herrera en COPE MÁS Málaga’, con Mónica García. Según el profesor Salvo Tierra, la adelfa “ha demostrado ser una planta increíblemente resiliente en ambientes extremos”. Las carreteras, con altos niveles de contaminación, temperaturas abrasadoras y frecuentes sequías, presentan condiciones muy adversas. Sin embargo, “la adelfa no solo sobrevive, sino que prospera”.

Una de sus características más importantes es su sistema de raíces. “A diferencia de otras plantas que se hunden profundamente en el suelo, las raíces de la adelfa se extienden horizontalmente, creando una especie de red superficial. Esto le permite capturar la mayor cantidad de agua posible durante las breves lluvias y retener la tierra, evitando la erosión”, aclara el botánico. Además, su capacidad de adaptación le ha otorgado un rol crucial en la protección de ecosistemas ribereños, ayudando a prevenir desastres naturales como el deslizamiento de barro y piedras.

Una planta con historia y propiedades extraordinarias

Más allá de su uso en las autopistas, la adelfa tiene una fascinante historia. El profesor Salvo Tierra destaca un dato sorprendente: “la adelfa fue la primera flor en renacer tras la caída de la bomba atómica en Hiroshima, lo que la convierte en un símbolo de resistencia y renovación. Su capacidad para resistir radiación y condiciones extremadamente adversas la ha convertido en objeto de estudio por su impresionante resiliencia”.

Su belleza y durabilidad esconden un secreto, y es que hay que recordar que la adelfa es tóxica. Aunque no representa un peligro si solo se contempla, ingerir o entrar en contacto con su savia puede ser peligroso. Sin embargo, sus propiedades como barrera natural contra el ruido y el polvo, así como su capacidad para atrapar alérgenos y partículas en suspensión, la hacen ideal para su uso en zonas urbanas y rurales.

Un legado de 25 años en nuestras carreteras

Hace aproximadamente veinticinco años, España se enfrentó a una cuestión clave: ¿qué plantar en las medianas de las nuevas autovías que se estaban construyendo? Fue entonces cuando los expertos en botánica recomendaron la adelfa. Su bajo mantenimiento, su capacidad para reducir el ruido y su resistencia a la sequía la convirtieron en la planta ideal para acompañar el desarrollo de nuestra red vial. Desde entonces, ha sido un componente esencial en la construcción de nuevas vías, manteniendo nuestras carreteras más limpias, seguras y silenciosas.

Así que, la próxima vez que circules por una de las autovías o autopistas de nuestro país, recuerda que, más allá del asfalto, te acompaña una planta con una historia fascinante y una función crucial. La adelfa no solo embellece el paisaje, sino que protege y cuida el entorno, haciendo nuestras carreteras más seguras y sostenibles. ¿A que te han entrado ganas de rodearte de tu propia adelfa? Anímate, existen las adelfas enanas con colores alegres que decorarán tu casa o tu oficina.