Un policía, ante el trágico suceso de Andújar: "Tengo miedo a disparar contra un agresor por las represalias"
Un policía nacional ha fallecido este domingo en Andújar al intentar reducir a un hombre implicado en una pelea entre vecinos
Sevilla - Publicado el - Actualizado
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Dolor y mucha impotencia en la despedida al policía Juan José Lara Egea. Sus amigos lo conocían como Juanjo, y ha muerto en acto de servicio en el municipio jienense de Andújar.
Juan José Lara Egea tenía 40 años. Llevaba 15 años en el cuerpo. En su pueblo, Marmolejo, le conocían como Juanjo. Estaba casado y era un amante del Carnaval.
Este domingo acudió junto a otro compañero ante la llamada de un vecino de Andújar. ¿El motivo? Un veterinario jubilado volvía a amenazarlo. Según la investigación, el agresor tendría problemas psiquiátricos.
Un martillo y un cuchillo
Cuando la policia llegó al lugar de los hechos, dos agentes se bajaron del coche para intentar mediar. Uno de ellos era Juanjo. En plena calle, el agresor se dirigió hacia ellos. Iba decidido. En una mano llevaba un martillo. En la otra, un cuchillo. Fueron momentos de auténtico pánico.
Según ha podido saber COPE Andalucía, un disparo fortuito de su compañero acababa con la vida de Juanjo. Llega a herir de gravedad a su compañero, le da un fuerte martillazo en la cabeza y lo apuñala.
La principal hipótesis que se baraja es la de un disparo fortuito. El compañero de Juanjo habría intentado frenar al agresor disparándole en las piernas, pero el proyectil le atravesó la ingle y siguió su trayectoria hasta impactar fatalmente en el abdomen de Juanjo, que estaba a una distancia de unos diez metros del agresor.
Demasiado tarde para Juanjo. Pese a los intentos de reanimación , el agente natural de Marmolejo (Jaén), entraba en parada cardiorrespiratoria y los médicos no pudieron salvar su vida.
La investigación en estos momentos sigue abierta para saber qué ocurrió exactamente. Mientras, el ayuntamiento de Marmolejo ha decidido concederle la Medalla de Oro de la ciudad a título póstumo.
Aunque resulte extraño, el trabajo de policía no está reconocido como un oficio de riesgo. Entonces, ¿Qué pasa cuando un policía se ve en un suceso como este? ¿Está realmente preparado para disparar? Según la normativa, "solamente deberán utilizar armas en situaciones donde exista un riesgo racionalmente grave para su vida, su integridad física o la de terceras personas". Pero no dice nada más.
Pablo Pérez, policía nacional y portavoz del sindicato de policía JUPOL nos ha contado que existe un Reglamento Nacional de tiro, pero lo considera "insuficiente".
Según este policía, los agentes tienen miedo a disparar en acto de servicio aunque se vean amenazados. ¿El motivo? "Las represalias que pueda sufrir por parte de la Justicia". "Yo tengo miedo", ha reconocido ante los micrófonos de COPE Andalucía.
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