Desmantelada en Lebrija y El Cuervo una organización criminal que introducía cocaína y hachís en España

Importantísimo golpe de la Guardia Civil al narcotráfico en nuestro país, con la desmantelación de una organización criminal que introducía estupefacientes en España desde el norte de África, mediante potentes embarcaciones.

LOS CABECILLAS DE LA ORGANIZACIÓN SON DE LEBRIJA Y EL CUERVO

En la ‘Operación Doberman’, que es como la ha llamado la benemérita, las cifras hablan por sí solas y que han sido incautados 1.255 kilos de cocaína y 390 de hachís; se han localizado dos plantaciones con cerca de 600 plantas de marihuana; 9 vehículos, de los que cuatro habían sido previamente sustraídos.

Además, se ha intervenido más de 60.000 euros en efectivo, abundante documentación, dispositivos electrónicos de última generación, tres armas de fuego, y 6 embarcaciones semirrigidas valoradas en 1.500.000 euros.

Fruto de esta operación antidroga, la Guardia Civil ha detenido y puesto a disposición judicial a 51 personas como integrantes de una organización criminal. Los cabecillas eran un vecino de Lebrija y otro de El Cuervo, ninguno de los cuales hacía ostentación de su dinero y llevaban una vida discreta.

Aunque también ha habido detenciones en la localidad malagueña de Estepona, donde existía una rama de esta organización criminal y a la que precisamente se le intervino esos casi cuatrocientos kilos de hachís.

En total, han sido 23 entradas y registros los que la benemérita ha llevado a cabo en esta operación en las provincias de Sevilla, Cádiz y Málaga.

CASI OCHO MESES DE INVESTIGACIONES DE LA GUARDIA CIVIL

Según fuentes de la Guardia Civil, las investigaciones comenzaron el pasado mes de septiembre cuando agentes del instituto armado detectaron en la localidad sevillana de Lebrija una nave muy cercana al río Guadalquivir que estaba sirviendo como guardería para embarcaciones semirrigidas con potentes motores, como las que se usan habitualmente para el narcotráfico y que están actualmente prohibidas.

A raíz de este hallazgo, establecieron un dispositivo de vigilancia, observando cómo de la citada nave salían semirremolques en cuyo interior se presumían que podrían ir escondidas estas embarcaciones conocidas como ‘gomas’.

En una de estas vigilancias los agentes detectaron una nueva embarcación que poco después botan y días más tarde traspasa bultos a una embarcación más pequeña que es interceptada en la costa de Huelva y en la que incautaron unos fardos que contenían 1.255 kilos de cocaína de gran pureza.

Paralelamente, en Marruecos son intervenidos otros 476 kilos de cocaína, perteneciente a la misma organización que tenía la guardería ubicada entre Casablanca y Rabat.

Fruto de las investigaciones españolas y de la cooperación con las autoridades marroquíes, se reconstruye la ruta que siguió la cocaína desde Sudamérica a Europa, la cual llegaría a Marruecos a través containers que desembarcarían en el Puerto de Casablanca y de allí la llevarían a una guardería cerca de la costa entre Casablanca y Rabat. La droga se transportaba en vehículos al punto de carga en la playa, donde se acercaría la “goma” que, tras una larga navegación, llegaría a las costas del sur de España.

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