CORONAVIRUS
Nacho Vallejo del Hospital de Emergencias Covid: “somos humanos, tenemos momentos débiles y de bajón”
El coordinador de hospitalización reconoce que se viven momentos de duros y a veces de “bajón”
Sevilla - Publicado el - Actualizado
4 min lectura
Aunque muchos creemos que están hechos de otra pasta los sanitarios son humanos. Llevan un año empeñados en salvar vidas , con olas sucesivas , pocas treguas y nuevas recaídas.
Desde el 1 de febrero en Sevilla cuentan con refuerzo para frenar la evolución de la pandemia, el Hospital de Emergencias Covid.
En ese centro un equipo de trabajo “bien engrasado”, dedica su día a día a atender a pacientes de coronavirus con un protocolo bien organizado y un trato humano que va más allá de la relación profesional médico o enfermera/ paciente.
El coordinador de hospitalización de ese centro donde todo huele a nuevo es Nacho Vallejo, médico internista al que las autoridades sanitarias embarcaron en este proyecto.
Desde que se hizo con las riendas de la coordinación del área de hospitalización en un centro específico para enfermos covid, reconoce que han sido semanas de intenso trabajo y que como todo el mundo “hemos tenido muchos momentos de bajón porque la presión asistencial ha sido tremenda y de manera continuada“.
Por eso cuando el Hospital de Emergencias abrió sus puertas hubo una mezcla de sentimientos. Porque dentro de lo que “supone de dramático tener que abrir un hospital para la pandemia, el hecho de recuperar un edificio como éste que se encontraba en circunstancias penosas, es una buena noticia”.
Y es mucho más que sólo eso para los profesionales que se dejan la piel cada día. Es “un motivo de ilusión, de orgullo”, después de unos “meses muy duros de trabajo, con poca tregua” desde el año pasado. Por eso ha sido “un cierto estímulo e impulso para en este espacio nuevo seguir atendiendo a los pacientes y dar lo mejor de nosotros mismos”.
Profesionales como el coordinador de hospitalización reconocen que estamos pasando muchos meses difíciles, con la llamada fatiga pandémica y por eso algunos hemos tenido “momentos débiles pero creo que es bueno que también los profesionales expresen lo que sienten”.
Nacho Vallejo cree que la pandemia “nos va a dejar secuelas a todos y a nosotros también”, por eso hay que “prestarles ayuda, a los sanitarios que lo necesiten, porque como suele decirse, hay que cuidar al que cuida”.
En su todavía corta existencia como centro de pacientes covid, el antiguo Hospital Militar Vigil de Quiñones ha sido ya objeto de numerosos gestos de cariño de los ciudadanos.
Entre ellos, la emotiva carta del hijo del primer paciente de coronavirus fallecido en las instalaciones o una pancarta dando las gracias a los profesionales sanitarios que apareció colgada en la entrada del centro.
Son según el coordinador de ingresos, son gestos que “agradecemos porque se hacen de forma sincera, amable y siempre te llega ese mensaje de gratitud y más cuando se produce en momentos tan delicados como la pérdida de un familiar”.
Por eso, “aunque no tengamos éxito en nuestro trabajo" porque un enfermo fallezca, "sí tenemos éxito en acompañar a un paciente, en hacer que su marcha sea lo más humanizada posible, y que la familia sepa que hemos estado junto a él, que lo hemos cuidado”.
Los profesionales sanitarios no son ajenos a las informaciones sobre los incumplimientos como fiestas, botellonas o reuniones de amigos sin medidas de seguridad donde se generan nuevos positivos.
Nacho Vallejo asegura que esas formas de actuar “nos pueden incomodar, nos pueden ofender porque vemos la crudeza de la realidad y las consecuencias, un paciente que se nos va de las manos, abuelillos que vienen muy mal”.
Es verdad que en esos momentos “las personas se plantean si lo podían haber hecho mejor y haber tomado más precauciones”, pero creemos que “no son momentos de generar sentimientos de culpa, hay que ser compasivos y ofrecer mensajes más positivos que ayuden a los pacientes a curarse”.
En cuanto a los negacionistas o las personas que rechazan la vacuna, asegura que entre su equipo de trabajo, la “vacuna la hemos vivido con mucha ilusión porque creemos que es una herramienta que sin duda va a mitigar la pandemia”.
Entiende que es una “cosa nueva y es normal la incertidumbre, pero ante los negacionistas no hay que perder mucho tiempo, lo deseable es responder con resultados, con evidencias y con propuestas científicas”.
A pesar de los "negacionistas" o de aquellos que se saltan las normas, los sanitarios siguen adelante. El coordinador de hospitalización del antiguo Vigil de Quiñones asegura que aún con la presión o las circunstancias adversas, no están hechos de otra pasta, que su vocación es la de cuidar y que en su día a día no sólo aplican tratamientos médicos , su tarea es también “escuchar, dar ánimos, aliviar el miedo, mitigar el aislamiento o incluso cargar el teléfono de los pacientes para que puedan mantener al menos, ese hilo de contacto con la realidad y sus familias”.