¿Por qué se marchan cada vez más enfermeras a trabajar fuera de Sevilla?

Nuestras enfermeras y enfermeros se marchan de la provincia de Sevilla. Como ya pasó con los médicos, ahora estos profesionales se van a trabajar a otras provincias y a otras comunidades, como Madrid o Baleares. El motivo es la falta de estabilidad laboral. Las condiciones económicas tampoco son buenas y eso avoca a muchos profesionales a tener que marcharse a vivir lejos de su familia y en una constante incertidumbre, en algunos casos en edades en que esa incertidumbre ya debería haber pasado. 

Lleva años ocurriendo, pero el problema se empieza a cronificar. Desde el Colegio de Enfermería de Sevilla alertan de que este año ha aumentado un 20% el número de enfermeras que se marchan a trabajar fuera de Sevilla por las condiciones precarias de los contratos que ofrecen, que en muchos casos no tienen continuidad.

El año pasado se fueron 239 enfermeras a trabajar fuera de la provincia, según datos del Colegio de Enfermería de Sevilla, y en lo que va de año ya se han contabilizado 245, por lo que es más que probable que el dato aumente, con respecto a 2023, ya que el año aún no ha terminado. "Necesitaríamos 7.000 enfermeras más, según la ratio establecida por Europa" asegura el presidente del Colegio, Víctor Bohórquez. Las que se quedan tienen una mayor carga de trabajo y eso pone en peligro la salud de los ciudadanos, especialmente de muchas personas mayores, que son los que más atención requieren, y ese hartazgo merma la calidad de la atención.

Paradójicamente, este año ha aumentado el número de profesionales formados en Sevilla, es decir, aquellos que salen de la carrera. Pero terminan de estudiar, ven los contratos y las condiciones que les ofrecen y acto seguido deciden marcharse porque en otras ciudades como Madrid o Barcelona simplemente les hacen contratos más extensos de seis meses, un año, incluso dos.  

Bohórquez alerta de que en la provincia de Sevilla les llegan a hacer contratos hasta por semanas e incluso por días. "Contratos vencidos a finales de octubre, de familias que ya llevan años sin saber si van a tener continuidad en los contratos, y así no se puede mantener talento enfermero, ya que esa continuidad es la que marca la diferencia”

La situación es frustrante para estos profesionales, un colectivo eminentemente femenino, que en muchos casos acaba abandonando la profesión. Sevilla es la quinta provincia de España con peor ratio de enfermeras, ya que la media de la UE es de 800 enfermeras por cada 100 mil habitantes, mientras que en Sevilla no llega ni a las 500, exactamente 470 por cada 100 mil.

Desde el Colegio de Enfermería, piden que se apueste por una sanidad pública de calidad, porque aseguran que "eso va en pro de la defensa de la seguridad del paciente, porque es lo que se merecen y además los profesionales de enfermería están perfectamente capacitados para atenderla con todas las garantías".