De Jong ve una luz

El fútbol siempre tiene reservado un giro inesperado o un remate especial para cada historia. Luuk de Jong se marchó con su selección a oscuras, después de la cascada de errores que acumuló en el Camp Nou. Y fue en el encuentro ante Irlanda del Norte cuando vio cierta luz en una semana triste para él. Salió en la segunda parte y marcó el segundo tanto que sirvió a los holandeses a remontar el partido.

"Cuando ese balón cayó, supe de inmediato que podía marcar", relató tras el encuentro: "Sé cuál es mi papel en Orange. A menudo sólo entro cuando estamos perdiendo, pero siempre lo doy todo por el equipo e intento ser lo más valioso posible en los minutos que tengo. También me gustaría marcar cada partido con el Sevilla, pero sigo siendo optimista". Tras unos días en el que fue el centro de atención negativo, el delantero se recreaba en su reconciliación con el gol: "Supuse que la pelota llegaría al segundo palo, así que fui hacia allí partiendo desde la izquierda. Pude llegar a la pelota, pero pensé que iría directamente a portería. Afortunadamente, luego cayó bien y pude rematarla. Es un sentimiento maravilloso”.