¿La nieve artificial puede salvar una temporada de esquí sin precipitaciones?

La temporada de esquí 2023-2024 no ha cumplido las expectativas y son muchos los negocios que han acusado la falta de nieve a pesar de que la campaña ha culminado con abundantes espesores de nieve.

Las asociaciones turísticas han afirmado que "ha sido una temporada muy complicada" y que los grandes perjudicados han sido los establecimientos de material de esquí y los alojamientos. La hostelería también ha notado falta de clientela.

En este contexto y, asumiendo que la meteorología no se puede controlar, las asociaciones turísticas han reivindicado la necesidad de invertir en los sistemas de innivación, "que son los que han permitido abrir en el mes de diciembre y aguantar el tipo en determinados momentos".

El presidente de la Asociación Turística del Valle del Aragón, Luis Terrén, ha explicado en COPE que "el que tiene buenos sistemas de innivación lo nota y le va mejor". Sostiene que "las estaciones van mejorando en la fabricación de nieve y seguro que contemplan en sus planes de inversiones seguir avanzando en ese aspecto". Terrén tiene claro que "hay que hacer un esfuerzo porque es una garantía para que las estaciones puedan funcionar". Por eso, considera que as estaciones "tienen que seguir apostando por tener más superficie con cañones y sistemas más eficientes".

Por su parte, el presidente de la Asociación Turística Valle de Tena, Jesús Pellejero, ha reconocido que "aunque no tenemos una serie temporal que nos diga que cada año nieva más tarde, sí parece cierto que nieva a mayor cota". Por eso, también incide en que "necesitamos innivación porque es la solución". Pellejero pone como ejemplo las estaciones de esquí de los Alpes, Andorra o Baqueira Beret. "Trabajando la nieve y con innivación, somos capaces de ofrecer un buen producto y, por ello, necesitamos sistemas modernos y con mayores rendimientos".

¿Cómo funciona la innivación artificial?

La nieve artificial se origina por medio de los cañones que combinan en su interior agua y aire comprimido. En cada disparo, el agua sale pulverizada a gran velocidad gracias al aire, como sucede con los aspersores de riego. Posteriormente, al entrar en contacto con el aire de la estación de esquí, se convierte en nieve.

La conexión subterránea de los cañones está formada por dos tuberías separadas entre sí. La primera contiene el agua y la segunda el aire. En su interior se mezclan ambos elementos y desde ahí el cañón los expulsa por dos orificios independientes. Cuando se unen, cada gota de agua se transforma, por la acción del aire, en una pequeña bola de hielo, con un diámetro máximo de un milímetro y medio.

Hay que esperar a que baje hasta los 0?° centígrados y que haya una humedad mínima del 50 %. Los nuevos modelos producen nieve a partir de los 2 °C y con solo un 25 % de humedad. Se recomienda su uso exclusivo por la noche para evitar que el sol pueda derretir la nieve. Por lo tanto, las condiciones meteorológicas influyen muchísimo en el resultado final.