¿Sabrías qué hacer si te pilla un alud?

Los temporales de nieve que han asolado el Pirineo Aragonés en las últimas semanas han elevado el riesgo de aludes en la montaña que, actualmente, se sitúa en el nivel 3 en una escala de 1 a 5. Es un riesgo “notable”.

En este escenario, es fácil preguntarse qué haríamos si nos viéramos atrapados por un alud, o si tenemos los conocimientos básicos para afrontar una situación de este tipo.

Lo primero que tenemos que saber, es que existen dos maneras de resultar herido o de perder la vida cuando nos vemos sorprendidos por una avalancha de nieve. La primera es el daño por los traumatismos que el alud nos provoca al arrastrarnos y, la segunda, el ahogamiento.

El rescate en esta situación es una carrera contrarreloj porque, pasados los primeros 15 minutos enterrados bajo la nieve, las probabilidades de supervivencia descienden drásticamente y nosotros tenemos que ser los primeros en comenzar el rescate. ¿Cómo? Haciendo uso del material que todos los que salen a la montaña tienen que llevar. El director de la Oficina de la Montaña de Jaca, Íñigo Ayllón, explica que “los elementos básicos son el Dispositivo de Víctima de Avalancha, una sonda y una pala”.

Material básico y avanzado

El Dispositivo de Víctima de Avalancha (DVA) es un aparato que emite continuamente una señal emisora que supera la capa de nieve que el montañero tenga por encima en caso de estar sepultado. Los equipos de rescate o los receptores que lleven otros compañeros permitirán localizar cualquier señal a una frecuencia concreta con mucha exactitud, consiguiendo, en caso de actuar rápidamente, salvar la vida del accidentado.

La sonda es una vara plegable que ayuda a localizar con mayor precisión la profundidad a la que se encuentra una víctima de un alud. Está demostrado que su utilización reduce notablemente los tiempos de rescate, por lo que debemos buscar una sonda robusta que no se rompa cuando vayamos a utilizarla.

Pala. La herramienta para mover mayor cantidad de nieve en el menor tiempo posible. Es imposible retirar una gran cantidad de nieve con las manos.

La tecnología avanza y, para mejorar las posibilidades de no quedar atrapados bajo toneladas de nieve, existen las mochilas con airbag. Estas mochilas están asociadas al principio físico de la “segregación inversa” que prueba que, al aumentar nuestro volumen, nos mantenemos a flote en un alud.

Formación

Ayllón recuerda que, actualmente, clubes de Montaña, la propia Federación, los guías de montaña y centros como Alurte, en Canfranc o la propia Oficina de Jaca, imparten formación para aprender a utilizar estos aparatos. Además, los materiales se pueden adquirir fácilmente en tiendas y en establecimientos de alquiler de equipos de montaña.

Es fundamental tener conocimiento sobre su uso. Pero también hay que ser responsable y actuar acorde a las circunstancias en las que está la montaña, el equipo con el que salimos y nuestras propias capacidades. Minimizar los riesgos también es una decisión responsable.