Los más jóvenes ya disfrutan de la nieve en la mayor campaña de esquí escolar en las estaciones altoaragonesas

Desde esta semana y hasta el 5 de abril, el esquí y la convivencia en plena naturaleza se convertirán en una cita fija para miles de estudiantes 

Alumnos en la estación de Astún

Redacción digital

Madrid - Publicado el - Actualizado

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La Campaña de Esquí Escolar de la DPH, que inicia la temporada en las estaciones de esquí altoaragonesas se prolongará hasta comienzos de abril. En total, está previsto que 3.200 jóvenes se inicien en el deporte estrella del invierno con una actividad que tiene su “impacto social”, pero también cumple “un papel en la economía local de estos valles pirenaicos”.

En estos términos se expresaban Berta Fernandez, la responsable provincial de Cultura, y el alcalde de Canfranc, Fernando Sánchez, que han podido ver cómo comienza la actividad en la estación invernal de Astún con el director, Alejandro Madrid, y José Luis Oliva, responsable del centro coordinador y albergue de Canfranc, que junto al Velarta de Villanova y Quinta Vista Alegre en El Pueyo de Jaca son el lugar de alojamiento durante “una semana en la nieve que se pasa volando”, como decían algunos alumnos del colegio San Rosa, unos de los primeros en participar este año.

El hecho de que esta Campaña Escolar de Esquí se lleve realizando desde los años 90 significa que ahora los escolares, según la diputada responsable de Cultura, “tienen el esquí como una asignatura curricular más”, otra vez más se han dado cabida a todas las solicitudes registradas incluso sobrepasando las plazas que se habían ofertado. Si algo ha destacado Berta Fernández es el haber logrado extender la práctica deportiva durante los últimos años a todas las pistas de esquí alpino de la provincia: Astún y Candanchú, en el valle del Aragón; Formigal y Panticosa en el valle de Tena; y Cerler en el de Benasque.

En el valle del Aragón se percibe optimismo, donde Astún-Candanchú ya cuenta con alrededor de 25 kilómetros esquiables, 30 pistas abiertas y 17 remontes. Tal como ha puesto de manifiesto el alcalde de Canfranc, “la nieve es un sector estratégico en esta provincia y más para los municipios y los que vivimos aquí en invierno donde se vive de esto”. De ahí el papel que para él desempeñan estas actividades, de cara a “iniciar a los más jóvenes en el esquí, que se enamoren de este deporte como lo hicimos nosotros de niños”, recordaba.

A este respecto se ha pronunciado también el director de la estación, Alejandro Madrid, para quien la Campaña Escolar es una “ayuda importante” porque, apunta, “que vengan entre semana los colegios es la manera de dar vida a las estaciones y crear también futuros esquiadores”. Todos han querido reconocer el gran esfuerzo que se ha hecho por las estaciones, en condiciones difíciles, para que se pueda celebrar esta campaña y los usuarios puedan esquiar “a pesar de la falta de nevadas, en un estado bueno e incluso con sol todos los días”, añadían.

Primeros jóvenes esquiadores, por primera vez de todas las comarcas

Desde esta semana y hasta el 5 de abril, el esquí y la convivencia en plena naturaleza se convertirán en una cita fija para miles de estudiantes altoaragoneses. Los encargados de abrir la campaña esta semana han llegado de los colegios Santa Rosa y El Parque de la capital altoaragonesa, el montisonense Santo Domingo Savio y el Ramón y Cajal, de Ayerbe, entre el albergue de Canfranc y las estaciones de Astún-Candanchú y el de El Pueyo de Jaca y el centro invernal de Aramón Formigal-Panticosa. Después de que en los últimos años se ampliara a todos los valles pirenaicos con este tipo de instalaciones invernales, a estos 125 chavales la semana que viene se sumarán otros grupos que también subirán al bimonio albergue de Villanova-estación de Cerler, allí se cerrará la Campaña entre finales de marzo y abril.

Todos son escolares de entre 10 y 18 años de hasta cuarenta centros educativos que tienen más lejos la práctica del esquí y de esta forma tienen la oportunidad de pasar cinco días y otras tantas noches en una de estas comarcas pirenaicas. No en vano llegan de localidades como Alcolea, Fraga, Albelda, Sariñena, Monzón, Zaidín, Torrente de Cinca, Barbastro, Chimillas, Ayerbe, Broto, Tamarite de Litera, Adahuesca o de la capital altoaragonesa.

Tradicionalmente la Campaña de Esquí de la DPH ha estado dirigida a estos escolares que por su residencia habitual necesitaban pernoctar fuera de casa, pero como explica la responsable de Cultura, Berta Fernández, el año pasado “pusimos en marcha de forma experimental el programa de fomento del Esquí Escolar para aquellos que querían ir y venir, desplazarse diariamente desde sus lugares de origen para practicar el esquí”. Esta iniciativa surge de la demanda de alguna de las comarcas que ya tenían algún programa similar como las comarcas del Alto Gállego y La Jacetania, a las que este año se ha sumando la del Bajo Cinca.

La fórmula elegida es la de suscribir convenios con estas tres comarcas interesadas y la cifra de 1.500 escolares, a los que la DPH aporta unos 100 por asistente, se multiplica por dos con esta nueva modalidad. En este caso, son las comarcas las promotoras y gestoras del programa y la Diputación de Huesca aporta financiación para completar los 175.000 euros totales de la Campaña y llegando por primera vez a escolares de todas las comarcas.

El aprendizaje en las aulas se sustituye por el medio natural

La actividad principal es el esquí, cuya práctica se realiza en dos turnos desde alrededor de las 9:30 horas y hasta las 16 horas. Por si la actividad física fuera poco, la intensa programación está pensada para que puedan aprovechar esta semana al máximo. Desde el albergue de Canfranc, uno de los centros coordinadores de la campaña, José Luis Oliva detalla que organizan un conjunto de actividades permite a los escolares divertirse pero también aprender un poco más sobre el territorio en el que están con visitas al centro Alurte donde conocer todo lo que tiene que ver con riesgos naturales y aludes o la historia que encierra la estación internacional. Entre las actividades que gustan, está el patinaje, la yincana o las veladas y el karaoke porque para muchos niños esta experiencia no solo supone ponerse por primera vez los esquís, para muchos es la primera vez que pasan tanto tiempo fuera de casa.