El vuelo sin motor, un deporte que no tiene edad
El Aeródromo de Santa Cilia adapta sus servicios a las necesidades de público de todas las edades
Madrid - Publicado el - Actualizado
1 min lectura
El vuelo sin motor es un deporte sin edad. No es necesario poseer un buen estado de forma física ni aptitudes previas para practicar esta disciplina. Cualquiera puede disfrutar de los beneficios del vuelo a vela, una actividad que cada vez cuenta con más seguidores.
Un ejemplo claro de que el vuelo a vela es una actividad más que saludable a cualquier edad es Rafael de Muller. A sus 88 años, vuelve a los cielos en un velero, tras décadas sin tener contacto con este mundo. Muller realizó un curso de vuelo sin motor cuando tenía 17 años en las escuelas que entonces gestionaba el Ministerio del Aire en Llanes, Somosierra y Monflorite. No había vuelto a volar desde entonces, pero es evidente que mantuvo ese conocimiento durante 70 años.
Hace unos días, su familia -Muller tiene 11 hijos y 37 nietos- decidió invitarle a realizar un Amazing Pyrénées, para sobrevolar en un velero las cumbres cercanas. La experiencia resultó plenamente satisfactoria. Las condiciones permitieron un vuelo sin demasiadas complicaciones, incluso con algo de acrobacia. Rafael Muller no solo disfrutó de la ocasión, sino que además fue capaz de realizar a los mandos buena parte del vuelo. Una experiencia más que demuestra que el vuelo sin motor no tiene edad.
El Aeródromo de Santa Cilia, instalaciones del Gobierno de Aragón vinculadas a Turismo de Aragón, adapta sus servicios a las necesidades de público de todas las edades. Con una larga trayectoria a sus espaldas y muchos años de experiencia, los instructores del Aeroclub NImbus ponen todos sus conocimientos al servicio del vuelo sin motor para hacer de esta actividad un deporte asequible para todos, sea cual sean las circunstancias personales de cada uno.