Los militares siempre han tenido una gran implicación con Jaca

El presidente de la Asociación Sancho Ramírez, Juan Carlos Moreno, continúa hoy ofreciendo detalles de la vida en Jaca a principios del siglo XVIII. Hoy se centra en los militares de la Ciudadela y que, en algunos casos, mostraron una enorme implicación con la ciudad.

Uno de ellos era Don Alonso Bruno Madariaga Gaviria-Marmolejo, Marqués de Villafuerte, Caballero, Mariscal de los ejércitos, gobernador político y militar del castillo y de Jaca, natural de la ciudad de Sevilla. Cuando regresó a su ciudad natal, promovió un altar de Santa orosia en la iglesia del colegio de los Hermanos Mínimos de San Francisco de Paula. Este militar tuvo tres hijas en Jaca y a la primera de ellas la bautizó con el nombre de Orosia.

Otros nombres destacados fueron el teniente de rey, Francisco Ruiz de la Torre; el sargento mayor, Juan Ochoa de Olza o el comisario de artillería y guarda de almacenes en la fortaleza, Francisco Heredia.

El clero contaba con Marcos Ripa como capellán mayor de la iglesia de la Ciudadela.

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