El PP considera “urgente” ayudar a los agricultores y ganaderos afectados por los temporales y la sequía

El sector primario de nuestra provincia tiene una importancia capital. La posee porque es la causante de un gran número del empleo que se

en el medio rural turolense, porque genera productos de notable calidad que sitúan a Teruel en la referencia de la agroalimentación y porque el territorio dispone de las condiciones ideales para seguir siendo punteros en la materia.

El Grupo Popular en la Diputación Provincial de Teruel ha presentado una propuesta para su debate en el pleno, en la que hacen una ferviente defensa de la agricultura y la ganadería como sector estratégico. Como prueba de ello, consideran “urgente” que las administraciones públicas ayuden a los agricultores y ganaderos que se han visto afectados por los temporales de

y heladas, así como también por la sequía.

Esa colaboración la fundamentan en una serie de medidas que apuntan los ‘populares’ y que pasa, en primer lugar, porque los gobiernos de Aragón y España pongan en marcha medidas de apoyo a los agricultores y ganaderos afectados por las inclemencias meteorológicas, además de implementar una reducción de los módulos agrarios en renta que permita aliviar la situación de los trabajadores del sector. “No puede ser que ante estos sucesos o no reciban ayudas o las que llegan sean insuficientes porque no cubren ni los daños que han sufrido”, ha aclarado el portavoz del Partido Popular, Carlos Boné.

Para el representante del PP en la institución provincial, las administraciones “siempre tienen que estar al lado de aquellos que están pasando por dificultades” y, en la actualidad, lamenta que “son demasiados los casos” en los que los agricultores y ganaderos “se encuentran solos cuando sufren fenómenos de pedrisco, heladas o sequía”.

Es precisamente por ello por lo que el principal partido de la oposición ha presentado esta propuesta para su debate en la sesión plenaria, ya que “existe el riesgo real” de que muchos agricultores y ganaderos “dejen su actividad porque no pueden hacer frente al coste que supone poner remedio a las consecuencias de la meteorología”. “Con ello no solo les estamos abandonando, sino que también estamos acelerando el proceso de despoblación que se está viviendo en muchos municipios que tienen en la agricultura y la ganadería al principal motor de actividad económica, empleo y futuro”, ha señalado.