Una conversación que salva una vida: así evitó la Policía un suicidio en Zaragoza

La Policía Nacional ha salvado la vida de un hombre de 37 años que tenía la intención de suicidarse este pasado miércoles 31 de julio. Se trataba de un hombre encaramado a la barandilla del puente de la Almozara de Zaragoza, al lado de Plaza Europa, con un patente estado de nerviosismo y ansiedad. Los agentes, que supieron cómo acercarse a él, terminaron por asegurarle y salvarle la vida, siendo trasladado después a un centro hospitalario para recibir la ayuda psicológica pertinente.

Los hechos sucedieron sobre las 21.00 horas del pasado miércoles, cuando varios conductores que circulaban por el puente de la Almozara avisaron a dos policías de servicio que iban en moto sobre la presencia de un hombre en un lado de la barandilla con clara intención de arrojarse al río Ebro.

Inmediatamente, los dos agentes acudieron al lugar y observaron al hombre subido a la barandilla, tibuteando, y en un claro estado de nerviosismo y ansiedad mientras lloraba y gritaba con ademán de saltar al vacío. Los agentes se colocaron a cierta distancia para conseguir no ser rechazados y lograr tranquilizar al hombre.

Poco a poco, comenzaron a entablar conversación con él, al mismo tiempo que solicitaban la colaboración de Bomberos de Zaragoza y una ambulancia en el caso de que tuvieran que necesitarse.

Detectar las señales y ofrecer ayuda

Tras unos diez minutos de diálogo entre los agentes y esta persona, el indicativo consiguió que este accediera en un primer momento a sentarse en la barandilla y después a ponerse a horcajadas, aprovechando ese momento para cogerle y asegurarlo en la acera del puente, poniéndole a salvo en el bordillo de la calzada.

A la llegada de la ambulancia de Bomberos, el hombre de 37 años fue trasladado a un centro hospitalario de la ciudad para su valoración y asistencia por el personal sanitario pertinente.

La Policía Nacional ha querido recordar que todas las personas en su vida cotidiana se cruzan con otras que luchan en silencio contra la depresión, una enfermedad mental que afecta a millones de personas en todo el mundo. Se manifiesta de diversas formas como tristeza persistente, pérdida de interés en actividades habituales, cambios en el apetito y el sueño y frecuentes sentimientos de desesperanza. A menudo, quienes la sufren se sienten atrapados en una espiral de oscuridad y soledad.

Es muy importante identificar esta enfermedad para que, en caso de encontrarse ante una persona con estos síntomas, se le pueda ofrecer ayuda o una serie de recursos como los teléfonos de emergencias, teléfono de la esperanza o derivarlos a un especialista de la salud como un psicólogo, o bien a diferentes asociaciones creadas para estos casos, además de eliminar el estigma que muchas veces aún está presente hacia la enfermedad mental.