¿Qué pasa si tenemos un viaje contratado y nos toca ser mesa electoral?

La decisión de eximirnos depende de cada Junta Electoral. Las agencias de viajes recomiendan contratar seguros. La UCA pide flexibilidad y, si aún así nos toca, alegar fuerza mayor

Redacción digital

Madrid - Publicado el - Actualizado

4 min lectura

La convocatoria de Elecciones Generales el próximo 23 de julio va a a coincidir con las vacaciones de muchas personas. No es extraño tener un viaje ya contratado para esas fechas. Pero, ¿qué pasa si nos toca ser miembros de una mesa electoral? ¿Tener pagado un viaje es motivo suficiente para que nos exima de nuestra obligación legal?

Desde la Unión de Consumidores de Aragón (UCA) advierten de que esta causa no está incluida en el listado de 'excusas' que nos permiten eludir esta responsabilidad, como sí lo están, por ejemplo, ser mayor de 65 años, estar embarazada de más de 6 meses o en periodo de baja maternal.

El presidente de UCA, José Ángel Oliván, señala que, aunque han pedido cierta flexibilidad, lo cierto es que, en el caso de unas vacaciones, “la decisión queda a criterio de la Junta Electoral pertinente, y puede ser distinto en Zaragoza, Huesca y Teruel”. En cada caso, se valorará si se pueden cambiar las fechas o si el daño económico es importante, entre otros aspectos.

Presentada la alegación, la respuesta tardará pocos días en llegar. Si nos la deniegan, será el momento de reclamar para que nos devuelvan el importe del viaje.

“Partimos de la base de que si existe una resolución de la Junta Electoral diciendo que tenemos que ser presidente, vocal o suplente de mesa electoral, podemos alegar 'causa de fuerza mayor', de la misma forma que si nos toca trabajar ese día como miembros de las Fuerzas de Seguridad del Estado o como funcionarios imprescindibles para le buen funcionamiento de la jornada electoral”, señala Oliván.

Con ese argumento, deberemos dirigirnos a la agencia de viajes, el hotel, la inmobiliaria que nos ha alquilado el apartamento, la compañía aérea o cualquier empresa o particular con quien hayamos contratado el servicio.

“Su respuesta nos dará también idea de la calidad de la empresa, Vueling ya ha dicho que no va a poner ninguna pega en devolver el importe en estos casos, pero otra compañía aérea que empieza por R pondrá todas las pegas del mundo, porque lo hace siempre”, apunta Oliván en clara referencia a Ryanair.

Llegado el caso de que no nos quieran devolver el importe del viaje o cualquiera de los desembolsos que hemos tenido que hacer, “recomendamos poner una reclamación en Consumo, acudir a las juntas arbitrales o a las asociaciones de consumidores en caso de ser socios”, concluye Oliván.

¿SEGURO SÍ O NO?

El presidente de la Asociación de Agencias de Viajes de Aragón, Jorge Moncada, espera que las juntas electorales sean flexibles, “como lo han sido otras veces”. “Por lo general, y por la experiencia de otras elecciones, cuando una agencia presenta una carta o una factura y demuestra que el viaje se ha contratado con anterioridad suelen ser condescendientes con el cliente y les suelen eximir de ser mesa”, asegura Moncada.

Sin embargo, a nadie se le escapa que en comicios anteriores, convocados en mayo o noviembre, el número de personas afectadas por esta situación es muy limitado. “La segunda quincena de julio es cogollo de las vacaciones y la gente no lo entiende, está muy enfadada”, admite.

En cualquier caso, se podría eximir de formar parte de una mesa electoral a quienes tuvieran contratado el viaje antes de la convocatoria de las elecciones o del sorteo de las mesas. “Si lo has hecho después, no hay nada que hacer”, advierte.

Moncada recomienda contratar un seguro de cancelación, “los hay incluso que recogen de forma explícita este supuesto”, apunta. “Esto no exime de ser mesa, pero sí cubriría los gastos del viaje en caso de tener que anularlo”. En un viaje que cuesta 3.000 euros por persona, este tipo de seguros puede costar algo más de 100 euros. En un viaje de mil euros, podría costar unos 60.

Algunas corredurías de seguros han comenzado a publicitarse directamente con este argumento. Es el caso de Baycomi, cuyo anuncio reza: “¿Mesa electoral? ¡¡¡Protege tus vacaciones!!!”. Su gerente, Ruth Barrado, asegura que tuvieron la idea depués de que un grupo de chicas que se iban de Interrail después de la EVAU, preguntaran preocupadas por este asunto.

“Nadie nos puede decir que un viaje nos pueda eximir de ser mesa electoral, contratar un seguro al menos nos cubre el daño económico, porque el moral ya está hecho”, asegura.

Tanto Moncada como Barrado recuerdan que este tipo de seguros se pueden contratar incluso a posteriori. “Aunque el viaje lleve 2 meses contratado, se puede hacer, tiene un periodo de carencia de 3 días, no hay problema, pero siempre hay que hacerlo antes de recibir la carta de convocatoria de la Mesa Electoral”, puntualiza Barrado.

Desde la UCA, Oliván es algo más escéptico con estos seguros. “Tenemos muy mala experiencia con los seguros de viajes, casi nunca lo que pasa está incluido en las causas, te ponen muchas pegas, pasa como en las empresas, hoteles o compañías aéreas, algunos responderán y otros no”, concluye.

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