El Real Zaragoza, sin brillo pero muy práctico, mantiene su liderato tras ganar en Tenerife (0-1)

El Real Zaragoza, aunque no jugó un buen partido este sábado en Tenerife, -Fran Escribá, su entrenador, reconoció que fue el peor encuentro de su equipo de los tres disputados hasta ahora-, lo cierto es que continúa firme, sobre todo en defensa, en este inicio de temporada y logró un triunfo por la mínima en su visita al estadio Heliodoro Rodríguez López, lo que le permite seguir una semana más encaramado en lo más alto de la tabla clasificatoria tras haber sumado los nueve puntos posibles.

Hacía 43 años que el equipo aragonés no ganaba los tres primeros partidos de liga (en la campaña 80-81, con Manolo Villanova al frente, se ganaron los cuatro primeros partidos) y lo ha hecho sin que Crsitian Álvarez haya encajado ningún gol todavía. La solidez defensiva del grupo -con una zaga formada por jugadores que ya estaban en la plantilla- es más que evidente y es, sin duda, la clave en estos buenos resultados.

Cualquier enfrentamiento entre dos de los equipos que copan los primeros puestos despierta siempre un especial interés. En consecuencia, tanto Tenerife como Zaragoza tuvieron claro desde el inicio que debían realizar un denodado esfuerzo para llevarse los tres puntos en litigio.

Un buen ejemplo de este propósito de ganar se produjo a los tres minutos de juego con un disparo lejano de Toni Moya, pero Soriano se hizo con el control del balón sin problema alguno, mientras que por parte tinerfeña hubo que esperar bastante para verle a sus jugadores inquietar a Cristian Álvarez con verdadero peligro, a pesar de su dominio, plasmado en un número de saques de esquina mucho mayor que su rival.

Superada la media hora de juego, un disparo lejano de Roberto López rozó ligeramente en un defensor y casi le ocasiona un serio disgusto al meta zaragocista, pero finalmente pudo solventar el peligro al desviar el balón a córner, mientras que en los instantes finales también rechazó un envenenado disparo de Alexandre Corredera.

De esta manera concluyó una aburrida primera parte, para reanudarse el juego tras el descanso con unos conceptos tácticos bastante similares a los del inicio, aunque ahora, quizás, la asunción de mayores riesgos tanto por parte de unos como de otros. Escribá, viendo que su centro del campo no funcionaba, sustituyó en el intermedio a Maikel Mesa y a Toni Moya por Valera y Bermejo para dar sentido a las bandas.

Después de veinticinco minutos en los que ninguno de los dos equipos fue capaz de generar ocasión alguna, llegó el tanto de Jair Amador (m.69). Un lanzamiento de falta desde la izquierda a cargo de Sergio Bermejo, lo remató en el segundo palo el central lusocaboverdiano, acción que rechazó Soriano, para caer de nuevo el balón en los pies de Jair que, a placer, remató a la red.

Un manotazo de Ángel sobre la cara de Nieto mermó el ataque local al acabar con el delantero en el vestuario, expulsado, hecho que no impidió que Teto dispusiese de una buena oportunidad para igualar, pero el poste derecho aragonés repelió el disparo del jugador insular (m.87).

En definitiva, máximo provecho para casi la única ocasión de que dispuso el Real Zaragoza, en un encuentro en el que su rival tinerfeño realizó méritos más que suficientes al menos para no caer derrotado en este enfrentamiento.

CD Tenerife 0: Juan Soriano; Mellot, José León, Sipcic (Elady, m.81), Nacho; Waldo (Ángel, m.70), Sergio González (Amo, m.69), Alexandre, Luismi Cruz (Teto, m.57); Roberto López (Mo Dauda, m.57) y Enric Gallego.

Real Zaragoza 1: Álvarez; Fran Gámez, Jair, Francés, Nieto; Francho, Aguado, Toni Moya (Germán Valera, m.46), Maikel Mesa (Bermejo, m.46); Bakis (Mollejo, m.72) e Iván (Sergi Enrich, m.90).

Goles: 0-1, m.69: Jair.

Árbitro: Jon Ander González Esteban (Comité Territorial del País Vasco). Expulsó al local Ángel (m.76) por un manotazo a un rival, además, amonestó a los locales Sergio González (m.47), Amo (m.88) y Juan Soriano (m.88) y a los visitantes Maikel Mesa (m. 2), Fran Gámez (m. 37) y Francés (m.82),

Incidencias: Partido de la tercera jornada de LaLiga Hypermotion disputado en el estadio Heliodoro Rodríguez López ante 18.848 espectadores