La cara y la cruz de Bazdar: de brillar como titular a ser suplente, pasando por una seria lesión muscular

Son cuatro las dianas que ha conseguido el serbio (internacional con Bosnia) Samed Bazdar este curso. Una de las grandes inversiones del Real Zaragoza este último verano en el mercado y que en las últimas semanas atraviesa por horas bajas. Comenzó dejando grandes destellos, de gran delantero. Pero poco a poco ha ido perdiendo protagonismo. Más, si cabe, tras su lesión. 

Para conocer todos los estados de ánimo por los que ha ido pasando Bazdar este curso hay que remontarse al verano. El Real Zaragoza, después de muchos años sin invertir en esta posición en propiedad, puso toda la carne en el asador con el serbio. 

Un ariete pretendido por equipos como la Lazio, entre otros, y que el Real Zaragoza consiguió firmar por 1,5 millones de euros y cinco años de contrato. Fue el traspaso más alto en la etapa de segunda del club blanquillo y por un jugador que recientemente ha cumplido 21 años. 

delantero cotizado

Bazdar, en el inicio de la competición, ya demostró de lo que era capaz. En sus primeras actuaciones con el equipo blanquillo se mostró como un jugador incisivo, decisivo y participativo en el juego. De esos que son capaces de agitar y cambiar partidos. 

Ya lo demostró con su primer gol como zaragocista, ante el Levante. Saltó al campo en el minuto 68 y marcó el 1-2 definitivo en el minuto 85. Tres jornadas después, logró su primer y único doblete ante el Tenerife en el Heliodoro, con goles en el 74 y en el 82. Y dos jornadas después abrió el camino a la victoria ante el Eldense (en la ida) en el minuto 34. 

Su ritmo de goles y esas cifras de incidencia en el juego invitaban al optimismo. Más si cabe, cuando según el Observatorio del Fútbol Internacional dictaminó hace algunas semanas que el serbio es el 11º delantero mundial con mayor proyección. Lista en la que se encuentran otros grandes talentos como Samu Omorodion (Oporto), Endrick (Real Madrid) o Vitor Roque (Palmeiras). 

una lesión muy inoportuna

Casi coincidiendo con el desmoronamiento del equipo, Bazdar también tuvo una lesión muscular grave en el isquio derecho. Fue ante el Albacete cuando, en una carrera, dijo basta. Y ahí ya no pudo terminar su concurso en el partido. 

Desde ese punto, tuvo que recuperarse de sus dolencias, pero, a la vuelta, algo había cambiado. El jugador ya no era el mismo y esa frescura del inicio de la competición se había evaporado. Por no salirle, ni siquiera estaba atinando en los pases más sencillos. 

Ahora ha podido tomar oxígeno con su convocatoria y estancia con la selección de Bosnia. Veremos si ese periodo le ha venido bien en su vuelta. Este miércoles ya entrenó tras las ventanas internacionales con el resto de sus compañeros. 

interés de otros equipos

Pese a que ahora no pasa por su mejor momento, Samed Bazdar no ha dejado indiferentes a otros equipos de España y de Europa. En nuestro país, concretamente, el Sevilla y el Real Valladolid estarían interesados en hacerse con sus servicios de cara al curso que viene. Eso sí, los pucelanos siempre y cuando se mantuvieran en Primera División.