Los dos miembros de la 'banda de Badoo', condenados a 34 años de cárcel
Los dos acusados han sido declarados culpables del asesinato de un informático vasco, en la localidad zaragozana de Pedrola en septiembre de 2019

crimen badoo
Madrid - Publicado el - Actualizado
2 min lectura
El magistrado de la Audiencia Provincial de Zaragoza, Mauricio Murillo, ha condenado a 34 años de prisión a cada uno de los dos acusados del denominado 'crimen del Badoo', Mohammed A.D. y Hedangeline A.L., así como al pago de una indemnización a los familiares de José Antonio D., a quien según recoge la sentencia detuvieron ilegalmente, robaron, golpearon y asesinaron, en 2019, en Pedrola (Zaragoza).
En el fallo de la sentencia, el magistrado impone una condena de 25 años de prisión a ambos autores por asesinato, con inhabilitación absoluta durante el tiempo de la condena, junto con una medida de libertad vigilada durante 10 años, con la prohibición de aproximarse a menos de 200 metros y de comunicarse por cualquier medio con los familiares de primer grado del difunto.
Además, deberán cumplir seis años de prisión cada uno por detención ilegal como medio para cometer un delito de robo con violencia, con inhabilitación especial para el derecho de sufragio pasivo durante el tiempo de condena. A estas penas, se suma otra de tres años por estafa y el pago de las costas procesales a partes iguales.
En cuanto a la responsabilidad civil, Mohammed A.D. y Hedangeline A.L. deberán indemnizar, conjunta y solidariamente, al hijo del fallecido con 185.618 euros, a cada uno de los padres de la víctima con 50.625 euros; a cada hermano con 19.400 euros; y a los herederos con 1.800 euros. Asimismo, deberán indemnizar con 11.000 euros al ciudadano que les compró el turismo que sustrajeron a la víctima, al que estafaron.
LOS CRIMENES DE LA BANDA DE BADOO
La conocida como "banda de Badoo" tiene tres causas abiertas en los juzgados aragoneses. Usaban esta red social para quedar con sus víctimas haciéndoles creer que iban a mantener un encuentro sexual con la acusada. Una vez allí, les robaban con violencia. Su robo más violento fue este, que terminó con la muerte de Jose Antonio D.
El tribunal considera que el asesinato del informático es “una muerte violenta” por el informe aportado por el Instituto de Medicina Legal de Aragón (IMLA) que concluyó que se produjo por fracaso respiratorio, shock hemorrágico por el hemotórax y el hemiperitoneo, con presencia de tierra en faringe, laringe, esófago y estómago.
“La víctima fallece cuando todavía se encontraba con vida, pero en tal estado físico, a consecuencia de los golpes recibidos y que le provocan un gravísimo traumatismo torácico, así como sujeción mecánica previa por las muñecas con bridas, por lo que le es imposible cualquier reacción defensiva”, afirma la sentencia.