Cucharas y tenedores que se convierten en joyas con sello aragonés

De tenedor a brazalete o de cuchara a una pulsera en forma de cola de ballena. Es el original proyecto que desarrolla desde hace 8 años la aragonesa Blanca Alcañiz. Todo comenzó cuando estaba estudiando diseño y su padre le regaló una pulsera. Blanca pensó en reconvertir cuberterías antiguas en joyas. Primero lo hizo como un hobbie, pero en 2013 decidió lanzarse al mercado de las joyas artesanales de forma profesional. Así nació su marca: "Cuchara o Tenedor".

“Todo empezó como un hobbie cuando mi padre me regaló una pulsera. Yo estaba estudiando arte y diseño, ya me gustaba mucho este mundo, pero profesionalmente empecé en él hace 8 años participando mercados artesanales en Menorca que es donde vivo actualmente", nos cuenta Blanca Alcañiz en COPE.

EL PROCESO DE CREACIÓN DE CUCHARA O TENEDOR

"Todo son piezas únicas. Damos una segunda vida a esos cubiertos antiguos que en muy pocas ocasiones vamos a usar", afirma. Sin embargo, encontrar este tipo de cuberterías antiguas no siempre resulta sencillo. "Es dificil encontrar cubiertos de plata que sean estéticamente bonitos y con detalles. Antes de la pandemia iba a Berlin, Londres... Son ciudades donde puedo encomtrar cubertería de plata. En España hay mucha cubertería de alpaca que también utilizo para mis diseños. La compro en anticuarios, rastros o incluso, recibo donaciones de personas que conocen mi proyecto", asegura Blanca.

Además de la plata y la alpaca, Blanca también utiliza para sus diseños tenedores o cucharas de latón y acero: "Empecé con la pulsera de tenedor, pero es ya lo más visto, así que diseñé hace unos años una pulsera de cuchara creando una cola de ballena. Es la insignia de mi marca. El producto estrella".

Bajo el lema "Recuperar, Reciclar y Reutilizar", el proyecto de esta aragonesa fue creciendo. Hoy cuenta con varios puntos de venta en Aragón, Cataluña y las Islas Baleares, donde actualmente Blanca vive en Menorca. Allí tiene un puesto seis días a la semana en un mercadillo. Además, vende online.

"Funciona muy bien la venta online y las redes sociales, como Instagram. Además, creo colecciones diferentes en las que no se ve el origen del producto. Ahora acabo de sacar una colección que se llama Origen con 13 piezas, es una edición limitada", asegura Blanca.

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