Zaragoza, la ciudad de las 12 puertas

La Puerta del Carmen es uno de los monumentos más característicos de Zaragoza, pero no es la única puerta de entrada que la ciudad ha tenido a lo largo de su historia. La capital aragonesa ha llegado a tener hasta 12 puertas por las que sus vecinos y visitantes han accedido a ella a lo largo de los siglos. Actualmente la única que se conserva es la mencionada Puerta del Carmen, pero en diferentes lugares de la ciudad hay murales y diversos indicativos que nos recuerdan la presencia de esas 12 puertas. Repasar sus ubicaciones y pasear por ellas es un plan perfecto para conocer Zaragoza desde un punto de vista diferente. ¿Cuáles fueron las 12 puertas de Zaragoza?

1. LA PUERTA DEL ÁNGEL, LA GRAN ENTRADA A ZARAGOZA

La Puerta del Ángel es la más mítica e histórica de Zaragoza aunque, por desgracia, no ha llegado hasta nuestros días.

A lo largo de la historia recibió diversos nombres como el de Alcántara o Puerta del Puente. Fue restaurada en 1493 y a partir de ahí, comenzó a recibir el nombre de "Puerta del Ángel" por la figura ornamental que tenía sobre ella.

Actualmente, podemos ver algunos restos de dónde comenzaba esta puerta en la pared lateral de La Lonja. Fue derribada en 1821 por los daños causados durante Los Sitios de Zaragoza sumados a su mal estado de conservación. Esta puerta tuvo una vida adicional cuando se reedificó con motivo de la visita de la Reina Isabel II a Zaragoza en 1860. Fue desmontada totalmente en 1868.

2. PUERTA CINEJA Y SU ACTUAL LEGADO EN PLAZA ESPAÑA

Su nombre nos resulta especialmente familiar por las instalaciones de oficinas y restaurantes a las que da nombre en plena Plaza España de Zaragoza. Esto ya nos da una idea de cuál era la ubicación de esta puerta que no se ha conservado hasta la actualidad. Tenía el nombre de "Puerta Cineja" y se remonta a la época romana suponiendo el acceso a la ciudad desde la zona sur de su muralla. Según se cree, allí eran ejecutados los cristianos que eran perseguidos por el emperador romano de la ciudad, Daciano, y justo al lado había un foso donde eran arrojados.

Aunque la puerta se renovó en el S.XV, posteriormente sufrió graves daños durante la Guerra de la Independencia y fue definitivamente derribada en 1809. Sus restos actuales se pueden ver en la Calle de Los Mártires donde hay piedras de la base del arco y dentro del centro comercial Puerta Cinegia en el que hay restos de la antigua muralla.

3. LA PUERTA DE TOLEDO, AL LADO DEL MERCADO CENTRAL

Se trata de la tercera puerta romana de Zaragoza. La ciudad estaba enmarcada por varias puertas que recibían su nombre por la ubicación a la que dirigían los caminos que estaban tras ellas. Se ubicaba en la actual Calle Manifestación, justo antes de llegar al Mercado Central. Actualmente, entre la Calle Manifestación y la entrada a la calle Salduba hay dibujado un mural que nos muestra la ubicación exacta de esta puerta y su apariencia.

La Puerta de Toledo también tiene origen romano, aunque en la Edad Media sus torreones sirvieron como cárcel. Se llamó la cárcel de los "Manifestados", lo que dio el nombre actual a la Calle Manifestación de Zaragoza. En esta zona también se ejecutaba a los condenados a muerte en lo que ya en el S.XVI comenzó a llamarse la Plaza de la Justicia y cuyo nombre ha llegado hasta nuestros días. La Puerta de Toledo se derribó en 1843 debido a su mal estado.

4. LA PUERTA DE VALENCIA, LA ÚLTIMA PUERTA ROMANA

La Puerta de Valencia procede de la época de la Zaragoza romana y era la entrada a la ciudad desde el oeste de la muralla. Se ubicaba en la actual Plaza de la Magdalena, donde un mural nos recuerda su lugar e imagen.

Estaba perfectamente integrada en el paisaje urbanístico de la ciudad. En su parte superior se habilitaron viviendas durante la Edad Media.

Fue derribada en 1867 en respuesta a la necesidad de ampliar la Iglesia de la Magdalena y dar mayor visibilidad a la Universidad que, por aquel entonces, se ubicaba en esta plaza.

Además del mural que la recuerda, actualmente podemos ver aún algunos de sus restos en el muro de una de las viviendas de esta plaza. El museo de Zaragoza guarda también parte de sus restos.

5. LA PUERTA DEL CARMEN, LA ÚNICA QUE SE CONSERVA

Es la única puerta de Zaragoza que se conserva en la actualidad. Fue construida en 1789 formando parte del conjunto de puertas de entrada a la ciudad. Hoy en día no queda nada del muro que la acompañaba y la podemos ver en la glorieta del Paseo María Agustín de Zaragoza. Fue especialmente relevante durante Los Sitios en 1808 - 1809. En ella todavía se pueden ver los disparos de las tropas francesas que intentaban asediar la ciudad.

Durante la I Guerra Carlista, el ejército también entró a la ciudad a través de esta puerta en 1838. A pesar de ello, y de que un autobús se chocó contra ella en 1997, la Puerta del Carmen ha logrado mantenerse en pie hasta nuestros días.

6. LA PUERTA DEL PORTILLO, LA DE AGUSTINA DE ARAGÓN

El Portillo ha dado nombre en Zaragoza a una iglesia, a una plaza, a una estación... ¡y también dio nombre a una puerta! Su origen se remonta a comienzos del S.XII y era la salida más cercana de la ciudad para comunicarse con el Palacio de La Aljafería. Se contruyó, según la leyenda, en 1119 tras una aparición de la Virgen para derrotar a los musulmanes que pretendían atacar la ciudad. Estaba ubicada en lo que actualmente sería la entrada a Conde Aranda desde Paseo María Agustín.

Esta puerta se hizo conocida en la historia de Zaragoza por ser el lugar desde el que Agustina de Aragón realizó un disparo de cañón contra los franceses que querían entrar a la ciudad durante Los Sitios. Eso sí, los disparos que recibió la dejaron en tal mal estado que finalmente fue demolida. Posteriormente se reconstruyó, en 1813, para desaparecer definitivamente en 1896 debido a su mal estado.

7. LA PUERTA SANTA ENGRACIA Y SUS TRES UBICACIONES

La Puerta de Santa Engracia no se conserva en la actualidad y tiene la particularidad de que tuvo hasta tres ubicaciones diferentes. La más antigua y donde estuvo hasta el S.XVIII fue en la actual Plaza Santa Engracia, al lado de donde hoy en día esta ubicada la oficina de Correos. Allí vivían los encargados de su vigilancia pero, tras la Guerra de la Independencia, quedó en tan mal estado que se derribó.

Volvió a realizarse en 1830 como símbolo de homenaje a la resistencia ante los franceses. Se ubicó en el entorno de la Plaza Santa Engrancia pero más centrada en lo que actualmente es el Paseo de la Independencia. Sin embargo, el crecimiento de Zaragoza alcanzó los límites de la ciudad marcados por la Puerta de Santa Engracia, lo que paralizó sus obras de ampliación y fue, de nuevo, demolida en 1865.

Ya a finales del S.XIX, la instalación de la Puerta Santa Engracia dio cierto margen más de crecimiento a la ciudad y adelantó su ubicación a lo que actualmente es la Plaza Aragón. Allí se construyó en 1893. Era la entrada al Paseo Independencia con tres puertas centrales para peatones y dos laterales para coches y caballos. Tampoco duró mucho en esta ubicación. La ciudad siguió creciendo extrapolando los límites marcados por la puerta y además, dificultaba el paso del antiguo tranvia zaragozano. Fue definitivamente demolida en 1902.

8. LA PUERTA DE SANCHO, LA SALIDA A LOS HUERTOS

Actualmente se recuerda esta puerta con una de las principales avenidas del barrio de La Almozara que lleva su nombre, la Avda. Puerta Sancho. Fue una de las menos conocidas y de menos valía arquitectónica ya que servía unicamente como salida de la ciudad de Zaragoza hacia los huertos y zonas de cultivo de lo que hoy es el barrio de La Almozara.

Estaba ubicada en la actual calle Santa Lucía, muy cerca de Plaza Europa. Allí podemos encontrar un mural pintado que nos recuerda como era esta puerta.

9. LA PUERTA DEL SOL, CON RELOJ Y HORARIO

Seguimos con puertas desaparecidas y que han sido sustituidas en la actualidad por un mural a modo de homenaje. Aunque la más conocida es la de Madrid, Zaragoza también tuvo su propia Puerta del Sol. Era una puerta de poco valor arquitectónico, muy sencilla y usada principalmente por los aguadores que iban al Ebro. La puerta además se cerraba durante las noches, teniendo un horario limitado de uso hasta las 19:00 - 20:00 horas. Por ello, tenía un reloj en forma de sol en la parte superior. Este ornamento era el que le daba nombre.

Estaba ubicada en el Coso Bajo, casi a orillas del Ebro. Actualmente podemos ver un mural que la recuerda en su ubicación exacta, la bifurcación en el inicio del Coso.

10. PUERTA DE SAN ILDEFONSO Y EL MITO DE ALFONSO I

La Puerta de San Ildefonso suponía la entrada a la ciudad por la Avenida Cesar Augusto. Estaba situada como prolongación del Torreón de la Zuda. Actualmente ocuparía el espacio situado entre este Torreón y el Hotel NH Ciudad de Zaragoza. Se construyó en el año 1118 y por ella hizo su entrada el Rey Alfonso I el Batallador para llegar al Torreón de la Zuda y firmar las capitulaciones de la ciudad.

Desde ella se llegaba a la Plaza del Mercado, germen del actual Mercado Central. También se le conocía como la puerta de la "tripería" debido a que por ella se sacaban los restos del matadero. La puerta se fue deteriorando y degradando con el paso de los años. Por ella pasaban las aguas residuales del mercado y ello contribuyó a su mala conservación. Fue derribada en 1842 y se volvió a construir dos años después en ladrillo.

Tenía una rampa que permitía a los aguadores bajar al río Ebro. Finalmente, en 1903 y con la inauguración del actual Mercado fue derribada para favorecer la entrada a la ciudad de forma más fluida.

11. LA PUERTA QUEMADA RODEADA DE HUMO

Zaragoza también tuvo una puerta situada al final de la calle Heroísmo, entre esta vía y la Calle Asalto. Fue construída en el S.XVII y'posteriormente, fue reedificada en el año 1785.

Tenía un piso superior con dos balcones. La llamaban la puerta "quemada" porque junto a ella se situaban carboneros que encendían hogueras y, en los días de viento, el humo se elevaban hacia arriba y daba un tono ennegrecido a la puerta.

La documentación en torno a esta puerta es variada. Se cree que sirvió de acceso al barrio judio. Por el lado del extramuro de la ciudad, daba acceso a una zona de gran vegetación donde era sencillo poder perderse. Para evitar que los zaragozanos se perdieran en esta zona, la Iglesia de San Miguel hacia sonar su campana desde el atardecer junto a una luz instalada en su torre que servía como guía para regresar a la ciudad.

12. LA PUERTA DEL DUQUE, LA MÁS RECIENTE

La Puerta del Duque o del Duque de la Victoria es la última con un mural en su recuerdo que podemos ver actualmente en las calles de Zaragoza.

Fue una de las últimas en construirse en la ciudad, en lo que actualmente es la Plaza San Miguel y donde se puede contemplar el mural en su honor.

Su construcción dio mucho que hablar. Se realizó en tiempo récord porque se quería tener lista para la visita del General Espartero con motivo de la inauguración de la línea de tren Zaragoza - Madrid en 1856. Tan rápido se contruyó que, una parte de la misma, acabó derrumbándose por si sola. Se volvió a construir en 1865. El crecimiento de la ciudad chocó de lleno con la ubicación de esta puerta.

Así, primero se desmontaron sus vallas laterales y posteriormente, se acabó demoliendo en 1919.

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