La excavación arqueológica de Faro, una mina de cerámica vidriada

La cerámica vidriada está comenzando a constituirse como otro gran legado de la producción de la parroquia ovetense de Faro. El centro neurálgico de producción cerámica también se habría metido de lleno en este tipo de fabricación, más allá de la característica cerámica negra. Una excavación arqueológica en el antiguo alfar de Casa Tudela permite datar además los años de fabricación de esta cerámica vidriada. A expensas de las pruebas de carbono 14 para afinar en la concreción, los investigadores apuntan hacia el período que se ubica a finales de la Edad Media y a principios de la Edad Moderna.

En apenas dos meses desde que se está desarrollando la excavación, los arqueólogos y voluntarios han localizado ya 870 piezas. Objetos como platos, vasijas y hasta juguetes. Alfonso Fanjul dirige las excavaciones y se muestra sorprendido por estos hallazgos: "Es una cantidad exagerada. Hemos encontrado decoraciones hasta ahora inéditas. Nos hemos ido adentrando en algo que se lleva debatiendo años, que es el origen de la cerámica vidriada. Hay una cantidad de material arqueológico... Montículos formados exclusivamente por fragmentos de cerámica y por platos enteros".

Datar los años exactos

Una vez constatada que la producción en Faro iba mucho más allá de la cerámica negra y que también fue punto de nacimiento de la cerámica vidriada en Asturias queda por constatar la fecha exacta de esas fabricaciones. La datación comenzará una vez concluya la excavación en las próximas semanas y se espera que para primavera se pueda tener el dato exacto. Fanjul ya sitúa la posibilidad temporal: "El otro gran debate es cuándo se origina el debate en Faro. Las primeras piezas vidriadas aparecen mezcladas con algunas cerámicas claramente de finales del mundo medieval y comienzos de la Edad Moderna. Son fechas anteriores a lo que la mayoría de los investigadores se planteaba".

En la parroquia se sigue produciendo cerámica. Y eso que ha sido un año muy duro para la tradición, por el incendio que sufrió el taller de Selito en verano. El último taller de Faro. Pero la tradición ha quedado en manos de Verónica Rodríguez, que precisamente este miércoles ha culminado la primera hornada después de comenzar su trabajo en la parroquia hace unos meses. Para la Asociación de Amigos de la Alfarería de Faro supone una bocanada de esperanza, como afirma Eva Sánchez, secretaria de la Asociación: "Fue un año trágico por la explosión de la casa de Selito, pero levantamos cabeza con Verónica Rodríguez. Estamos contentos, no queremos que muera la alfarería de Faro de ninguna manera". La propia Asociación espera que 2024 sea un año clave para desarrollar, de mano del Ayuntamiento, el centro cultural vinculado a la cerámica de Faro y creen que sería una ubicación idónea para todas las piezas que se están sacando de las excavaciones.