Inaugurado el Centro para la Recuperación de Animales Marinos en el Acuario de Gijón
El primer habitante del CRAMA BIOPARC es un ejemplar de tortuga que apareció varado en la Playa de Bañugues con plásticos en su tracto digestivo y una aleta, muy lesionada
Foto CRAMA Acuario Bioparc Gijón - COPE Gijón
Madrid - Publicado el - Actualizado
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El BIOPARC Acuario de Gijón alberga desde hoy el Centro de Recuperación de Animales Marinos de Asturias como instalación de apoyos a la red de varamientos del Principado y cuenta ya con su primera inquilina: una tortuga boba recogida a finales de enero en Bañugues en muy mal estado y que se está recuperando antes de volver al mar.
CRAMA BIOPARC
El nombre CRAMA BIOPARC fue propuesto por la clase de 2º de Primaria del colegio Sagrada Familia (El Entrego), que además estuvo presente durante la inauguración, y fue seleccionado de entre los más del centenar propuestos desde los centros escolares de la región y las familias.
El centro está destinado a acoger animales salvajes como tortugas o focas que puedan aparecer varados en nuestras costas y sean rescatados por el personal de la Red de Varamientos y el proyecto está cofinanciado por la Fundación Biodiversidad y la Fundación BIOPARC.
CONTENEDORES PARA ACOGER A LOS "PACIENTES"
La construcción en la zona habilitada, ubicada en la parte trasera del Acuario gijonés, incluye cubas para alojar a los animales recogidos y, también, zonas auxiliares como un laboratorio para analíticas y la toma de datos de los animales.
Hay dos tanques o piscinas para acoger ejemplares de tortuga y tres cubas para que puedan recuperarse los ejemplares de foca. En el caso de las focas, tienen una instalación cubierta para que no se vean afectadas por la presencia de los cuidadores y del ser humano. Por lo que se refiere a las tortugas, las piscinas están abiertas y ya se puede ver nadar a "Uno": el primer paciente que ha llegado al CRAMA. Cuando lo recogieron en la Playa de Bañugues, estaba a punto de perder la aleta delantera derecha por efecto de la necrosis. Tenía plástico en el tracto digestivo y apenas podía nadar. A día de hoy ya nada con soltura por el tanque y ha recuperado 200 gramos.
TRABAJOS DE INVESTIGACIÓN
El trabajo de los veterinarios y biólogos del Centro de Recuperación de Animales Marinos de Asturias (CRAMA) irá unido a la investigación que permitirá colaborar con otras entidades para poder ampliar el conocimiento científico-técnico sobre la fauna marina y ayudar a proteger el medio ambiente.