Otoño: tiempo de castañas en Asturias
En esta época del año los bosques del Principado de Asturias son auténticos almacenes donde podemos encontrar este rico fruto seco. Nutritivo, sabroso y muy sano
Madrid - Publicado el
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El otoño es tiempo de castañas, de bosques sembrados de hojas y de esos “erizos de tierra” que contienen en su interior dos o tres castañas. La castaña es un fruto que nos aporta múltiples beneficios si sabemos incluirla en nuestra dieta.
Los bosques del Principado de Asturias ahora mismo están llenos de castañas tiradas por el suelo y podemos encontrarlas de forma barata y sana. Ya que si nos damos un paseo podemos tener el rico manjar a coste 0 y a la vez encontrar un buen escenario para hacer ejercicio.
Una tradición muy asturiana es tomar castañas asadas y sidra dulce. Una actividad que mezcla la esencia de dos frutos muy ricos y con la que podemos pasar una estupenda tarde de otoño
- Aquí te damos una serie de motivos por los que podemos incluir una aportación de castañas en nuestra dieta:
1/. Gran fuente de energía
Las castañas son una gran fuente de energía, ya que contiene hidratos de carbono complejos que se absorben lentamente y que no provocan subidas bruscas de azucar. Mantienen los niveles equilibrados de glucosa durante más tiempo, reduciendo así la sensación de hambre
2/. Mejoran la flora bacteriana
Son muy ricas en fibra, lo que favorece el tránsito intestinal y el desarrollo de la flora bacteriana beneficiosa. Contribuye a evitar las enfermedades típicas de estos tiempos: patologías cardiovasculares, diabetes y diferentes tipos de cáncer.
3/. Pocas grasas y muchos hidratos
Su composición se aproxima más a los cereales que a la de otros frutos secos, ya que contiene más hidratos de carbono y menos grasas. Se estima que tiene 2,2 gramos de grasas por cada 100 gramos de castaña. No contiene colesterol “malo” por lo que con su consumo se reduce el riesgo de tener arterioesclerosis.
4/. Regulan la hipertensión
Tienen un alto contenido en potasio, por lo que ayuda a controlar la retención de líquidos y favorece la diuresis. Las castañas se consideran muy aptas para personas que tienen problemas de riñón y para los hipertensos.
5/. Favorecen el desarrollo óseo
Las castañas tienen en su composición un alto contenido en calcio y magnesio, lo que ayuda mucho al desarrollo de los huesos y a evitar la osteoporosis. En edad infantil, se considera una buena dieta para el correcto desarrollo de los dientes.
6/. Buenas para la maternidad
Son muy ricas también en ácido fólico y folatos, por lo que se recomienda que a lo largo del embarazo las mujeres incorporen a su dieta una cierta cantidad de castañas. En la época de lactancia también son muy aconsejables por ese alto contenido en ácido fólico.
Por estos y otros muchos motivos alimenticios las castañas son un buen complemento para poder incorporar a nuestra dieta y sobre todo porque las tenemos al alcance de la mano con un pequeño paseo por los alrededores de nuestros pueblos y ciudades.