Tras la ola de incendios, oleada de críticas a la gestión forestal de Barbón

"Cada uno es responsable del incendio que hace, pero el Principado lo es de todos". Asi de contundente se muestra Xuan Valladares, portavoz de Asturias Ganadera, tras la oleada de incendios que ha arrasado miles de hectáreas en Asturias.

"Está claro que el que prende es el primer culpable", pero, a su juicio, que el fuego se extienda y alcance las dimensiones de estos días se debe al exceso de matorral y "el monte se matorraliza por culpa de la gestión del Principado".

Los ganaderos también rechazan las acusaciones que les culpan de iniciar muchos de los fuegos para generar pastos. "Los mayores incendios ocurren donde no hay ganaderías, donde no hay gente en los pueblos. Y los que sufren las consecuencias negativas son los ganaderos", recalca.

No piensa lo mismo el portavoz de la Coordinadora Ecologista de Asturias. Fructuoso Pontigo cree que el fin de los acotamientos, la prohibición de utilizar como pasto las zonas quemadas, ha facilitado la proliferación de incendios. En lo que sí coincide con los ganaderos es responsabilizar al gobierno de Barbón y su mala gestión forestal de lo ocurrido estos días.

"Se cargaron las brigadas de investigación para evitar que se persiguiera los incendios, se retiraron los acotamientos, tenemos escasos medios de prevención y extinción y los últimos camiones bomba que se han comprado no se pueden utilizar porque no están homologados", denuncia.

El caso de los 12 camiones auto bomba irrita especialmente a los bomberos del Servicio de Emergencias del Principado, que este lunes han iniciado una huelga para reclamar mejoras en la gestión. Los camiones fueron presentados, a bombo y platillo, en enero y tres meses después siguen sin poder ser utilizados. La versión oficial es que están pendientes de una "mejora de seguridad" que el fabricante había ofrecido "a coste cero".

Una explicación que no convence a la bombera Nati Canto, que recuerda como estos días tuvieron que acudir a sofocar incendios, en equipos de sólo dos personas, y "sin vehículos forestales que nos ayudasen", porque estos camiones no se pudieron utilizar.

"Estuvimos diezmados de personal y diezmados de medios materiales", asegura recalcando que "la situación ya no da más de sí. Por desgracia, se tuvo que evidenciar de esta manera y esperemos que se tomen las medidas oportunas para que se cambie la gestión de este servicio de una vez".

Los bomberos no son los únicos con escasez de medios y personal, los agentes de Medio Natural estás incluso peor. El incendio ha puesto en evidencia la gravedad de una situación que llevan meses denunciando. "Estos días algunos compañeros participaron en el operativo sin emisora, algo que es básico", pone como ejemplo Miguel Garrido, de la Asociación de Agentes de Medio Natural.

A la falta de medios se une la mala gestión. Los agentes ya habían advertido con varios días de antelación de lo que podía ocurrir y no se hizo nada, según Garrido.

"Sabíamos que las condiciones iban a ser muy malas", asegura, "no puede ser que nos encontremos en esa situación y que el Principado no estableciera vigilancias preventivas que en muchos casos son disuasorias y en otros conseguirían identificará los incendiarios.

Barbón insiste en que se hizo todo lo que se podía

Frente a este aluvión de críticas, el presidente asturiano, Adrián Barbón, se defiende asegurando que la mayoría de los incendios fueron intencionados y "cuando hay más de cien fuegos al mismo tiempo, no hay previsión ni prevención que resista".

No obstante, Barbón reconoce que el actual sistema de prevención de incendios necesita mejoras, por lo que pretende sentar en una misma mesa a todos los agentes implicados. Una mesa en la que participarían expertos, ayuntamientos, bomberos, ecologistas, ganaderos y agricultores, para tratar de llegar a un consenso sobre las medidas a tomar a partir de ahora.