Una década de compromiso social: Cáritas Koopera celebra 10 años en Asturias

Cáritas Koopera celebra su décimo aniversario en Asturias, una década dedicada a la integración social, así como al reciclaje de prendas de vestir usadas. Durante estos diez años, han brindado oportunidades laborales a personas en riesgo de exclusión social. Desde sus establecimientos en la región, desempeñan un papel vital en la promoción del desarrollo comunitario y la protección del medio ambiente.

Caritas Koopera se destaca por su labor en la generación de oportunidades de trabajo para personas en riesgo de exclusión. Actualmente, la cooperativa emplea a 40 trabajadores, proporcionándoles una vía hacia la inclusión social y económica. La directora y coordinadora de Cáritas Koopera Asturias, Aida Rodríguez, ha asegurado en COPE que: “Esperamos seguir creciendo. Podemos anunciar ya que a finales de año contaremos con una segunda tienda en Gijón, tienda que generará nuevos puestos de trabajo”. Además, como parte de su compromiso con la comunidad, entrega alrededor de 20 mil prendas al año a personas con necesidades de vestir, asegurando que tengan acceso a ropa de calidad de manera digna y sin costo alguno.

La cooperativa, a lo largo de sus diez años de presencia en la región, ha recogido, clasificando y preparando para su reutilización o reciclaje más de 6 millones de prendas. Con una red de 170 contenedores distribuidos estratégicamente en más de 30 municipios, la entidad ha logrado una cobertura excepcional, facilitando a los asturianos un medio accesible para desechar su ropa de manera responsable.

Caritas Koopera Impulsa la sensorización de contenedores de ropa para una gestión ambientalmente sostenible

Caritas Koopera está avanzando en la gestión de residuos textiles con la sensorización de sus contenedores de ropa. Esta iniciativa no solo promueve la eficiencia logística, sino que también reduce el impacto ambiental. Al tener acceso a información en tiempo real sobre el volumen de ropa en los contenedores, la cooperativa puede optimizar las rutas de recogida, recogiendo más kilos de ropa con menos kilómetros y, por ende, menos emisiones. Esta tecnología no solo mejora la gestión de los recursos, sino que también refuerza su compromiso con la sostenibilidad ambiental.