LEYENDAS AZULES

García Barrero, hijo de Falín y sobrino de Emilín: "Eran caballeros del deporte. Honraron al club y a Oviedo"

Junto a Marianín, mañana recibirán su homenaje con una puerta en el Tartiere. Será uno de los actos centrales en torno a la fiesta de aniversario antes del partido ante el Eibar

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García Barrero, hijo de Falín y sobrino de Emilín: "Eran caballeros del deporte. Honraron al club y a Oviedo"

Redacción digital

Madrid - Publicado el - Actualizado

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El Real Oviedo afronta un partido especial, con la fiesta del aniversario presidiendo la previa. Una fiesta que estará llena de actos, como la de ponerle nombre a tres puertas del Carlos Tartiere. Emilín, Falín y Marianín serán los protagonistas. El jabalí del Bierzo estará presente en la cita y también familiares de las otras dos leyendas. Uno de ellos, Santi García Barrero, hijo de Falín y sobrino de Emilín. Y ex jugador del conjunto azul durante seis temporadas. En Deportes COPE Asturias nos cuenta como vivirá un día especial para su familia, oviedista por los cuatro costados.

Y es que es una familia en la que emana el oviedismo: "Nuestra historia está muy ligada al Real Oviedo. Estamos muy agradecidos y muy orgullosos. Es un orgullo porque puedo presumir de ser hijo, sobrino y hermano de futbolista del Real Oviedo. También mi sobrino estuvo en las categorías inferiores. Y yo jugué desde los ocho o nueve años hasta los 25 que me fui al Logroñés".

García Barrero no tuvo la suerte de ver jugar a Emilín y Falín, pero sí tiene referencias de lo que era el fútbol en aquellos tiempos: "Lo que mejor refleja aquella época era que los equipos que venían a jugar quedasen en Oviedo y que salieran charlando desde el campo, bajaran por Buenavista y el Campo San Francisco a tomar sidra por el centro. Independientemente de quien hubiera ganado o perdido y eso pasaba también cuando el Oviedo viajaba fuera. Había una hermandad que ahora es impensable".

Fueron dos nombres que dejaron mucha huella: "Era una época en la que se metían muchos goles. El centro del campo del Real Oviedo era Pacheco y Falín. Luego la delantera mítica con cinco delanteros. Mi padre era muy técnico, de desplazamientos en largo y mi tío era extremo izquierda con muchísima calidad. Eran caballeros del deporte. Gente que honraron al club y a la ciudad y eso es lo que queda. Son reflejo de una época dorada y que mostraron una fidelidad a los colores".

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