Un hombre en silla de ruedas ve un furgón mal aparcado en Gijón y su reacción se hace viral: "No lo justifica"

Las ciudades están, cada vez más, enfocadas hacia una arquitectura inclusiva, con eliminación de barreras arquitectónicas que permitan a personas con algún tipo de discapacidad moverse sin dificultad. Las rampas van ganando terreno frente a las escaleras; y las aceras van desterrando los bordillos, con plataformas únicas o, por lo menos, con rasantes en los cruces y pasos de cebra.

Superado este paso, facilitar la vida a las personas con movilidad reducida depende, también, del civismo de los ciudadanos. Y cuando desaparece, las personas que lo sufren se pueden enfadar. Tanto como un gijonés en silla de ruedas cuya respuesta ante una de estas situaciones se ha hecho viral por desmesurada y poco habitual.

Una furgoneta mal aparcada

Todo ha sucedido en la calle de Dionisio Fernández-Nespral Aza, que continúa hacia Pintor Mariano Moré, en el entorno del Museo del Ferrocarril y junto al Solarón. En ese punto, una furgoneta mal aparcada ha impedido el paso de este hombre, que solo encontraba un hueco para continuar por la acera, con un pequeño bordillo, pero insalvable para su silla de ruedas.

El momento lo ha captado el usuario de Instagram 'jartoka3', que lo ha compartido en su perfil en esta red social. "Todo bien, nada mal", dice este usuario que ya advierte de que, aunque "el señor está indignado con razón", eso "no justifica su reacción".

En España, hay casi 2 millones y medio de personas con movilidad reducida. Para evitar casos como el de Gijón, en muchas ocasiones, cuidadores o familiares les ayudan por las calles de la ciudad. Es el caso de los padres de Josete. Un niño con parálisis cerebral al que sus padres sacaban de paseo, en silla de ruedas, para que disfrutase del sol y el aire fresco.

Sin embargo, con el paso de los años, fue imposible seguir empujando y el padre del pequeño se las ideó para adaptar un patinete a la silla de ruedas. Así surgió una startup que ayudó, también, a los sanitarios que trabajaron en el hospital de campaña de IFEMA durante la pandemia.

"No va de empujar"

En el caso de Gijón, el usuario que grabó y colgó el vídeo se ofreció a ayudar al hombre en silla de ruedas, empujándola para salvar el bordillo. Sin embargo, el hombre, enfadado porque la furgoneta estaba obstaculizando el paso habilitado para personas con movilidad reducida, decidió declinar la ayuda e irse por otro lado: "La cosa no va de empujar".

Así que, dio la vuelta a la silla de ruedas y recorrió unos metros, por la calzada, en dirección prohibida.

Sin embargo, en vez de volver a la acera a la altura del siguiente paso de cebra, siguió hacia delante, de forma temeraria, cruzando dos carriles cuando el semáforo estaba en verde para los coches. A pesar de hacer sonar sus cláxones, el hombre hizo caso omiso y cruzó la avenida de José Manuel Palacio hacia la plaza de la Estación del Norte: "Me tienen que dar paso aunque vengan coches", aseguraba.

"¡Este es un rockero! Tampoco era para tanto; no está nada bien hecho tampoco", decía 'jartoka3', que entendía el cabreo del hombre en silla de ruedas; aunque señalaba al conductor de la furgoneta: "Aparcas mal, crees que no molestas a nadie y ¡pum! Seguro que, si ve este vídeo, se muere de vergüenza".