Asturias se dirige hacia el confinamiento perimetral de todas sus zonas urbanas

Unas 802.000 personas, en torno al 80 por ciento de la población asturiana, estarán confinadas en sus municipios de residencia a partir del martes cuando el municipio de Siero, el cuarto más poblado de Asturias, se incorpore a los concejos donde se aplican las últimas medidas restrictivas implantadas por el Gobierno regional.

Dichas medidas se aplican cuando los municipios alcanzan el nivel más alto de riesgo, denominado 4+, y están ya en vigor en catorce de los 78 concejos asturianos -incluidos los de Gijón, Oviedo y Avilés- a la espera de que en los tres próximos días entren en vigor también en los de Salas, Valdés y Siero.

Además del cierre perimetral, en esos territorios también se aplica la clausura del interior de los bares y la reducción del aforo del comercio durante periodos iniciales de quince días, un nuevo sistema puesto en marcha por el Principado el 18 de enero para tratar de contener la pandemia de manera individualizada según la evolución epidemiológica de cada municipio.

El Gobierno asturiano ha tomado hoy la decisión de incluir en esa situación de riesgo 4+ al concejo de Siero después de que ayer se contabilizaran en la región 479 nuevos contagios por covid-19 -más de 35.000 desde el inicio de la pandemia- y se registraran ocho nuevas muertes, que elevan por encima de los 1.500 el número total de fallecidos en el Principado.

Esas cifras en la comunidad más envejecida de España sitúan la tasa de letalidad entre las más altas del país mientras la tercera ola sigue elevando la presión sobre la red hospitalaria donde 497 pacientes con confirmación o sospecha de covid-19 siguen ingresados en planta mientras que las unidades de cuidados intensivos acogen a 92 enfermos.

Según el Gobierno asturiano, la situación epidemiológica es de especial gravedad dado que en las dos últimas semanas los dos indicadores de incidencia a 7 días se han mantenido en el máximo nivel de alerta según los baremos del Ministerio de Sanidad con una tasa global de 328 casos por cien mil habitantes entre la población general y de 295 entre los mayores de 65 años.

Durante este tiempo se han llegado a duplicar dichos valores, que el 13 de enero se situaban, respectivamente, en 151,64 y 139,93 casos y la incidencia actual, tanto global como en mayores, se sitúa en niveles similares a los del 11 de noviembre de 2020 mientras que la presión asistencial alcanza cifras parecidas a las del 28 de octubre.

La Consejería de Salud ha precisado que esto se debe a que el crecimiento está siendo más sostenido en el tiempo que el registrado durante la segunda ola al disminuir los casos entre personas mayores y con domicilio en residencias.