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Un joven de Oviedo deja las drogas gracias al apoyo de Cáritas y envía un mensaje de esperanza a las personas sin hogar

Alexandro Temelie es usuario del albergue de Oviedo, donde ha encontrado ayuda para rehacer su vida: "Hay esperanza y gente que puede ayudarnos"

Borja García

Oviedo - Publicado el - Actualizado

2 min lectura

      
      
             
      

El problema de la vivienda cada vez es más acuciante. Los precios están por las nubes y apenas hay pisos vacíos. Las causas son múltiples. Y las consecuencias, también. Las principales, que cada vez hay más personas que tienen que buscar ayuda para encontrar un sitio donde vivir. Una ayuda que presta Cáritas, desde diferentes recursos asistenciales. Ahora mismo están en máximos. Apenas hay alguna cama libre en toda Asturias dentro de todos los dispositivos que gestiona la entidad social de la Iglesia. Que además de ayudar con la vivienda, también lo hace con el acompañamiento. Como el que presta a Alexandro Temelie, usuario del Albergue Cano Mata de Oviedo. El apoyo de Cáritas le ha ayudado a ver la luz: "Hay esperanza y gente que puede ayudarnos. He dejado de consumir y estoy en una etapa de progresión".

Alexandro Temelie es un usuario del albergue Cano Mata que Cáritas gestiona en la capital del Principado. Hoy ha estado junto a otros compañeros vendiendo productos elaborados por ello en el centro de la ciudad y ha querido mandar un mensaje, primero a su familia, si es que le llega: "He estado en una situación muy mala debido al consumo de estupefacientes. Me llevó a perder mi empleo y mi familia. Desde aquí quiero pedirles perdón por las palabras malas que dije si es que esto les llega". Y más allá del perdón, también ha querido mandar un mensaje de esperanza a las personas sin hogar: "Decirles a las personas sin hogar que hay esperanza, gente que puede ayudarnos, dispuesta a escucharnos. A mí me han ayudado mucho. He dejado de consumir y estoy en una etapa de progresión y de ayudar a los demás que me hace sentir muy bien".

Un grupo de usuarios del albergue y de trabajadores de Cáritas

RECURSOS AL LÍMITE

El de Alexandro es un testimonio que impacta y que muestra una realidad cambiante en los últimos años. Lo notan desde Cáritas. El perfil de la persona que va buscando ayuda porque no tiene dónde vivir está cambiando. Ya no es solo gente con pocos recursos o con problemas de adicciones. En el albergue Cano Mata hay una media de 15 personas que tienen trabajo, pero a las que el sueldo no les da para una vivienda. Una realidad dura y que hace a Zoraida Sienra, responsable del programa que atiende a las personas sin hogar de Cáritas Diocesana, alzar la voz: "Lo que se avecina no es positivo. No solamente acogemos el perfil que veníamos acogiendo. Estamos recibiendo a personas que hace un mes gozaba de una vida totalmente normal. Y que por pérdida de empleo o desajustes familiares acaban en la calle. Y esto va a ir a más". 

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