Oviedo impulsa el “Club de los Valientes” para erradicar el acoso escolar y mejorar la convivencia en las aulas

El Club de los Valientes ya es una realidad en el IES Alfonso II de Oviedo. Este proyecto, dirigido a promover la convivencia y combatir el acoso escolar, busca no solo erradicar cualquier forma de violencia entre los estudiantes, sino también mejorar su calidad de vida. La iniciativa invita a los alumnos a identificar y rechazar las conductas tóxicas que puedan perjudicar sus relaciones y bienestar emocional, proponiéndose como una herramienta clave para su éxito académico y personal.

Con la misión de crear un ambiente de relaciones solidarias, cálidas, respetuosas y libres, el IES Alfonso II ha movilizado a toda la comunidad educativa en torno a un mismo objetivo: lograr “violencia cero” dentro y fuera de las aulas. Padres, profesores, alumnos y hasta abuelos se han unido en jornadas de concienciación y trabajo colaborativo para establecer las bases de un entorno escolar seguro y positivo. Esta unión no solo busca reducir el acoso, sino transformar las relaciones sociales de los estudiantes y enseñarles a ser valientes y empáticos.

El valor de la solidaridad y el respeto en las aulas

La mirada del IES Alfonso II está puesta en formar jóvenes capaces de denunciar la violencia, de tratar bien a los demás y de valorar la amistad. Con esta propuesta, el centro busca sembrar las bases para un alumnado comprometido con la convivencia pacífica y con una firme postura frente a cualquier tipo de maltrato.

Miguel, un alumno entusiasta del proyecto, ha contado en COPE Oviedo con claridad lo que representa para él el Club de los Valientes: “Son varias personas que apoyan, ayudan y siempre están en contra de la violencia. Estoy muy orgulloso de formar parte de este club y ser un valiente más”, afirma.

En este proceso, surgen figuras fundamentales, como explica Greta Crevera, alumna de 4º de la ESO, quien señala que el programa distingue entre dos tipos de personas frente a una situación de acoso: los bystanders, aquellos que presencian una situación de violencia y no intervienen, y los upstanders, quienes deciden apoyar a la víctima y dar el paso de valentía necesario para frenar el abuso.

Familias, docentes y alumnos unidos contra la violencia

Para que el proyecto funcione, la implicación de las familias es fundamental. Paco, abuelo de uno de los estudiantes y voluntario en la actividad, considera que el Club de los Valientes es “una experiencia educativa de primer orden y fundamental para acabar, o al menos reducir significativamente, el acoso escolar”. Rosa, madre de otro alumno, comparte la misma visión y añade: “Si mi hijo tiene un problema, quiero que encuentre el respaldo de personas, amigos o no, que estén ahí para apoyarlo. También quiero que él aprenda a ser valiente y hacer lo mismo por los demás”.

Este esfuerzo conjunto ha despertado el interés de otros centros educativos. El IES La Albericia de Santander, que intenta poner en marcha su propio club, ha visitado el IES Alfonso II para tomar nota de esta iniciativa. Con ello, el Club de los Valientes de Oviedo no solo está marcando un cambio en su propia comunidad, sino que se perfila como un modelo a seguir para otros institutos que buscan construir entornos educativos seguros, solidarios y libres de violencia.