Así fue el desfile del Día de las Fuerzas Armadas en Asturias: "Apoteósico"

Asturias se ha rendido al Día de las Fuerzas Armadas. El desfile terrestre de este sábado ha puesto broche a varios días de actos. Y lo ha hecho por todo lo alto. Miles de personas han disfrutado del paso de todo el potencial del Ejército, con más de un centenar de vehículos y con más de 3.000 militares recorriendo las principales calles de Oviedo, que estaban abarrotadas.

La expetación ya se hacía notar a primera hora de la mañana y a medida que avanzaba el reloj, las calles aledañas a la zona del desfile ya eran un hervidero. Esperando por el momento cumbre, que era la llegada de los Reyes de España. A las 11:30 ya comenzó el despliegue, con la Guardia Real ya preparada y dispuesta para recibir a Don Felipe y a Doña Letizia, que justo a mediodía pusieron pie a tierra después de llegar escoltados por la caballería. Lo primero, los saludos protocolarios para posteriormente dar lugar a la interpretación al Himno de España.

Con la llegada de los Reyes ya llegaron los primeros gritos de "Viva el Rey" y también de "Viva España" y de "Viva la Reina". Letizia acaparó gran parte de las miradas por eso de jugar en casa. La gran pitada de la mañana se la llevó la ministra de Defensa Margarita Robles, que cuando llegó a la zona recibió notables abucheos. También el ministro del Interior, Grande-Marlaska.

La primera parte de los actos eran los que más carga emotiva tenían. Después de pasar revista y de que los Reyes se acomodoran en la tribuna, llegó el salto de los paracaidistas con la bandera nacional. Uno de ellos, el que portaba la bandera, asturiano. El cabo primero Miguel Antonio Gómez Rivas, catalogados como deportista de alto nivel por el Consejo Superior de Deportes. Y es que tras el descenso de la bandera, se ha izado la bandera y ha tenido lugar el homenaje a los caídos, mientras la banda de la Guardia Real interpretaba el solemne 'La muerte no es el final', cantado a pleno pulmón por los soldados allí presentes y por el público asistente.

El ruido de motores invadió entonces el ambiente y la Patrulla Águila surcó el cielo de Oviedo para dar el pistoletazo de salida a que el Ejército mostrara todo su potencial. El despliegue motorizado centró los primeros compases del desfile. Motocicletas, carros de combate, camiones, quitanieves... Gran parte de los vehículos con los que cuentan las Fuerzas Armadas abrieron paso a lo que luego fue el desfile a pie, con diferentes batallones, y que fue cerrado por las caballerías. Uno de los momentos de más aplausos fue el paso de los GEAS (Grupo de Actividades Subacuáticas), cuerpo al que pertenecía uno de los Guardias Civiles asesinados hace unos meses en Barbate por una narcolancha. También el paso de la Legión concentró gran parte de las ovaciones.

Asturias respondió al Desfile del Día de las Fuerzas Armadas, con una multitudinaria asistencia y viviendo los actos con pasión y con un gran seguimiento.