CONSUMO
La cifra de menores que han bebido alcohol en Asturias es "preocupante": ¿qué papel juegan los padres en la prevención?
El Principado ha puesto en marcha, este verano, la campaña de concienciación 'En nuestras fiestas, a menores de edad, ni gota de alcohol', pero advierte de que los padres deben "educar y dar ejemplo"
Asturias - Publicado el - Actualizado
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El 77% de los menores de edad asturianos han bebido alcohol alguna vez en su vida. Es un dato que refleja la última Encuesta sobre Uso de Drogas en Enseñanzas Secundarias, que revela también que la prevalencia es mayor entre las chicas y que el inicio del consumo es demasiado precoz: a los 14 años, dos de cada diez se han emborrachado.
Para rebajar las cifras de ingesta de alcohol entre los menores de 18 años de Asturias, el Gobierno del Principado ha puesto en marcha, este verano, la campaña de concienciación 'En nuestras fiestas, a menores de edad, ni gota de alcohol' con pancartas y carteles en bares, restaurantes o 'praos' de una veintena de concejos; entre ellos, Oviedo, Gijón y Avilés.
La campaña busca prevenir y retrasar la edad de inicio del consumo de alcohol; y no está dirigida solo a los adolescentes; también advierte a familias y adultos sobre la importancia de la abstinencia del alcohol para la salud.
Educar y dar ejemplo
De hecho, la responsable del Servicio de Planificación de Salud Mental y Adicciones, Purificación Saavedra, ha explicado en COPE que "la responsabilidad de los adultos como figura clave en la educación y como modelo de comportamiento y conducta son fundamentales" y abunda que, "en esto, como en todo, se trata de educar y dar ejemplo" porque -advierte- "no solo se educa con la palabra y las buenas intenciones".
Saavedra ha recalcado, además, que una de las motivaciones de la campaña es recordar, también a los mayores de edad, los riesgos asociados al consumo de alcohol: "El hecho de que sea legal, no nos puede hacer olvidar que se trata de una droga con riesgos".
"Tenemos la generación más sana"
No en vano, "se trata de la sustancia con mayor morbilidad y morbilidad asociada, la que genera un mayor número en admisiones a tratamientos de desintoxicación; y está acreditado que las consecuencias para los chavales a nivel físico, psicológico y social son importantísimas", avisa.
A pesar de los datos, Saavedra rechaza que los menores beban más alcohol que antes: "Tenemos una de las generaciones más sanas, pero ahora nos damos cuenta de sus consumos porque tenemos más estudios y de más calidad". Reconoce, sin embargo, que "es preocupante por las consecuencias nocivas para la salud de los menores" y porque, además, en Asturias, está prohibida su venta.