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Los geólogos temen nuevos desprendimientos en la autopista del Huerna: “El riesgo se mantiene”

Carlos López, decano de la Facultad de Geología, explica causas y posibles plazos para reabrir la vía

Inmaculada Rivas

Oviedo - Publicado el - Actualizado

2 min lectura

      
      
             
      

La empresa Aucalsa, concesionaria de la autopista del Huerna (AP-66), no se atreve a dar plazos para la reapertura de la principal vía de comunicación entre Asturias y León tras el descomunal argayo que ha cortado totalmente la circulación en ambos sentidos. El desprendimiento de tierras está en el punto kilométrico 76 de la vía y el tráfico está siendo desviado hacia el puerto de Pajares por la N-630 por donde ahora circulan 9.000 vehículos diarios.

La intención de Aucalsa es abrir un paso provisional “cuanto antes” mientras el talud es estabilizado totalmente. Las dimensiones del argayo hacen prever que esa tarea va a llevar “semanas o meses”, según ha explicado en COPE el decano de la Facultad de Geología de la Universidad de Oviedo, Carlos López Fernández. Primero hay que analizar la roca. Después habrá que sanearla y, por último, acometer la estabilización que “llevará bastantes semanas”.

SEPA

Vista aérea del argayo en la autopista del Huerna

CAUSAS DEL ARGAYO

El profesor Carlos López cree que la ladera tenía todos los ingredientes para desprenderse teniendo en cuenta que las rocas son débiles y el macizo está “profundamente fracturado”. A esas circunstancias añade el agua de la lluvia que puede tener acumulado el talud y la degradación de los materiales utilizados en su día por el paso del tiempo, caso de las vigas horizontales de hormigón ancladas en la montaña.

Delegación del Gobierno 

Equipos de emergencia en la autopista del Huerna

“La meteorización de las rocas durante todo este tiempo, junto con la acumulación de agua y que las estructuras se han ido debilitando pueden explicar lo ocurrido”, aclara Carlos López.

¿podría haber nuevos desprendimientos?

La respuesta del decano de la Facultad de Geología es rotunda: “Sí, el riesgo se mantiene”. A renglón seguido explica que “seguramente hay más masas potencialmente inestables y más zonas que pueden desprenderse”. Por ese motivo, da por hecho que la primera labor de los técnicos de Aucalsa será sanear la roca inestable para proceder a su estabilización total. ¿De cuánto tiempo estamos hablando? “Semanas o meses”, según el experto.

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