Un médico alerta de las consecuencias físicas y psicológicas de las guardias de 24 horas
Los profesionales de la medicina pagan una alta factura por llevar a cabo este servicio
Gran Canaria - Publicado el - Actualizado
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Probablemente, una de las tareas más duras a las que se enfrenta los médicos del Servicio Canario de la Salud es las guardias de 24 horas. Una tarea que requiere de una resistencia grande por parte del facultativo y que no pocas veces les pasa una grave factura desde el punto de vista de su propia salud, con patologías, que pueden cronificarse.
Así lo asegura Miguel Ángel Jiménez Encinoso, médico residente de medicina familiar y comunitaria del Centro de Ssalud de Maspalomas, que esta mañana ha contado en Herrera en Gran Canaria su experiencia. Reconocía que “te lo planteas durante la formación universitaria y no te haces una idea real a lo que te enfrentas. Hasta que haces la primera y te das cuenta del cajón desastre que suponen”.
Las guardias se hacen desde las nueve de la mañana, hasta las nueve de la mañana del día siguiente. Y en ese periodo de tiempo afrontan las consultas de todos los pacientes que llegan al centro. Y lo hacen sin parar, mientras que la capacidad de los profesionales va menguando de forma natural por el paso del tiempo. “Un dolor abdominal a las seis de la tarde, no lo tratas de la misma manera que de madrugada o cuando está colapsado el servicio, algo continuo. El manejo del estrés y la capacidad para analizar varias cosas al mismo tiempo no es la misma”, advierte.
Tardan días en recuperarse
Es un panorama que viven continuamente estos profesionales que destacan como, con la acumulación de pacientes, llega un punto que ya no saben a cuál están tratando. Pero el trabajo se complica cuando tienes que estar atento no solamente a las consultas, sino también a hacer pruebas complementarias para un correcto diagnóstico o a suministrar un tratamiento.
A la dureza física y emocional de trabajar así, se une que muchas veces cuando salen de su turno no pueden descansar. “Es inviable descansar con toda la adrenalina. Sales de tu turno y no puedes descansar cuando llegas a casa. Cuando cae la noche caes redondo y al día siguiente estás hecho polvo, tardas días en recuperarte, nos cuenta Miguel Ángel.
La estructura del sistema sanitario y la falta de personal en Atención Primaria y los hospitales están detrás de esta situación, que acaba repercutiendo en la salud de estos profesionales en el largo plazo.
En tratamiento psicológico o psiquiátrico
Un alto porcentaje ve mermada su calidad de vida con síndromes de burnout y tratamientos psicológicos y psiquiátricos, porque esto no se sabe llevar: “Los médicos son la cara visible para el paciente y la resolución depende de ti. Esto, sumado a la cantidad de horas, es un estrés tan grande que acaba cronificándose”.
Por si esto fuera poco, la constante necesidad de actualizar los procedimientos hace necesario mantener la formación, llevándose muchas veces el trabajo en casa. “La vida fuera del centro médico es complicada para el sanitario, cuenta este especialista.