UD LAS PALMAS
La UD Las Palmas transforma radicalmente sus números con Diego Martínez
El equipo amarillo encara el final de la primera vuelta con cuatro encuentros en Gran Granaria y dos exigentes visitas
Gran Canaria - Publicado el
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La UD Las Palmas llega a la pausa de selecciones en el mejor momento de la temporada. Tras el cambio de técnico, tanto los números como las sensaciones cambian de forma importante en todos sus ámbitos.
El equipo hasta la salida de Luis Carrión, no había conseguido inaugurar el casillero de victorias, además de tener una más que negativa estadística de casi dos goles recibidos por encuentro en las primeras nueve jornadas de liga.
Tras la incorporación de Martínez, los cambio más importante sin duda alguna han sido tanto el intangible de la confianza adquirida por los jugadores amarillos, como la llegada de las primeras victorias y por supuesto el giro que han dado los números defensivos del equipo, reduciendo la sangría en portería propia con cinco goles recibidos en los cuatro encuentros ligueros disputados.
Hay que destacar también que con Diego Martínez se han incrementado los datos en ataque con 1,75 goles favorables por encuentro, frente a los 1,25 en la etapa Luis Carrión, lo que ha influido claramente en la consecución de las últimas victorias.
Por otro lado, el futuro inmediato de los amarillos se presenta de lo más interesante. El equipo cierra la primera vuelta con cuatro partido en el Estadio de Gran Canaria y con dos más que exigentes salidas.
Los partidos como local tienen el valor añadido de que vendrán rivales que también luchan de forma directa por salvar la categoría: RCD Mallorca, Real Valladolid, RCD Español y Getafe CF. Mientras, las dos únicas salidas que quedan para finiquitar la primera vuelta serán de lo más exigentes, con el sólido líder el FC Barcelona a final del presente mes y una mejorada Real Sociedad como última salida de esta primera parte de la temporada.
Con estos datos y con los números obtenidos en las últimas jornadas, los de Diego Martínez siguen con los piés en el suelo, pero con toda la sensación de que el futuro inmediato puede traer buenas noticias a poco que se aprovechen los encuentros ante su público.