TURISMO

Masca, la joya de Tenerife pendiente de regulación por el turismo masivo

El Cabildo estudia desde hace años controlar el acceso al caserío, el segundo enclave más visitado de la isla tras el Teide

ctv-kns-masca

Daniel Pinelo

Tenerife - Publicado el

3 min lectura

Las movilizaciones producidas en Canarias recientemente en torno a la viabilidad del modelo turístico están generando múltiples debates sobre el futuro del archipiélago y la conservación de los espacios naturales protegidos.

La presidenta del Cabildo de Tenerife, Rosa Dávila, ha puesto el foco en los últimos días en la posibilidad de cobrar una tasa por acceder a enclaves masificados y sometidos a una fuerte presión de visitantes. El pleno ha aprobado este viernes una moción para iniciar los estudios para implantar la medida a partir del 1 de enero de 2025, bajo el nombre de ecotasa, aunque no hace honor a la realidad. Sobre la mesa están sitios tan emblemáticos como el Parque Nacional del Teide y los parques rurales de Anaga y Teno, aunque por el momento no se conoce qué puntos serán exactamente.

Desde 2017 se cobra por acceder al extremo noroccidental de Tenerife, la Punta de Teno. En realidad, el visitante paga por el trayecto en guagua, un euro a la ida y otro a la vuelta, ya que durante la mayor parte del día solo es posible llegar en este medio de transporte.

La medida, que tuvo una fuerte contestación social por parte de los vecinos de Buenavista del Norte, se ha demostrado con el tiempo como efectiva, ya que se trata de un enclave muy sensible que venía soportando durante años una gran carga de vehículos. Lo interesante de la medida es que, frente a lo que propone ahora el Cabildo, en Teno no se distingue entre residentes y no residentes: la guagua cuesta lo mismo para todos.

La presión turística sobre Masca

Uno de los lugares que lleva años en el punto de mira y donde se baraja repetir el modelo de Teno es en el caserío de Masca, también dentro del parque rural. La diferencia es que aquí sí hay población residente, que tendría que gozar de lógicas excepciones.

Masca es el segundo enclave natural más visitado de Tenerife, solo por detrás del Teide. Históricamente, ha estado asilado del resto de la isla, lo que le ha permitido conservar su identidad de pueblo tradicional y estar considerado Bien de Interés Cultural con categoría de Conjunto Histórico.

Pero la masificación turística hace años que llegó a este barrio de Buenavista. No solo por la belleza del lugar, sino también por el abrupto barranco que desciende hasta el mar, un sendero muy frecuentado que terminaba con la salida en barco hasta el puerto de Los Gigantes.

Un barranco con riesgo de muerte

La regulación de Masca comenzó a gestarse, en realidad, en 2018. Un temporal hizo inaccesible la bajada del barranco y el Ayuntamiento de Buenavista tomó la decisión de cerrarlo indefinidamente, tras años de varias muertes accidentadas por la caída de piedras. El Cabildo aprovechó para acometer trabajos de acondicionamiento y mejora de la seguridad hasta que permitió su reapertura en 2021. Lo hizo, ahora sí, con restricciones: con un número limitado de plazas diarias que incluía pagar para descender y volver a subir, previo paso por el centro de visitantes.

Al mismo tiempo, se ejecutaron las obras de mejora y ampliación del embarcadero de la playa de Masca. El Ayuntamiento y el Cabildo esperan poder regular en breve su uso comercial para que quienes desciendan el barranco puedan volver a salir por mar a Los Gigantes y, como novedad, a Punta de Teno.

ctv-lse-pasasinhuella masca ficmec20233

¿Guaguas lanzaderas?

Pero todavía queda pendiente la gran regulación de Masca: permitir únicamente el acceso al caserío para turistas a través de guaguas lanzaderas desde Buenavista y desde Santiago del Teide, algo en lo que se empezó a trabajar en el mandato anterior, pero que ha quedado pausado. La saturación de vehículos día sí y día también supone un sufrimiento para los vecinos de Masca, que se encuentran sin espacio para estacionar en el barrio donde viven.

La propuesta del Cabildo para cobrar a los foráneos por visitar espacios protegidos vuelve a poner las miradas en Masca, uno de los tesoros de Tenerife que necesita con urgencia de mimos por parte de las Administraciones públicas. Veremos cuál es el desenlace.

Temas relacionados