La hostelería no cree que la prohibición de fumar en las terrazas afecte a los negocios

Los fumadores optarán por alejarse de las terrazas para continuar con su actividad y así no incumplir la normativa

Bryan Estupiñán

Tenerife - Publicado el - Actualizado

2 min lectura

El Ministerio de Sanidad ha dado un paso más en su lucha contra el tabaco, después de aprobar el Plan Integral de Prevención del Tabaquismo. La intención de esta medida, además de reducir su consumo, es proteger a la población no fumadora del humo que emiten los cigarrillos. La gran pregunta que surge es si los bares, cafeterías y restaurantes verán reducida su clientela.

El presidente de la Asociación de Empresarios de Restauración y Ocio de Tenerife, Ramón Fariña, cree que el sector no se verá perjudicado. El ejemplo ya se dio en el pasado durante la pandemia, cuando ya se tuvo la experiencia de que los fumadores no podían encender un cigarro en las terrazas. Esto motivó una alternativa por parte del consumidor, que optó por alejarse unos metros de las terrazas para no incumplir la normativa.

Al final se debería tratar el tema desde la educación, donde pueden convivir las personas ajenas al humo del tabaco y quienes lo consumen. Una de las soluciones que propone el presidente es que el fumador pregunte a las demás personas si les molesta el humo. Algo que en la teoría puede resultar sencillo, pero que, en la práctica, intervienen muchas variantes en las que se asiente en contra de la propia voluntad por el simple hecho de no resultar desagradable a la otra persona, o evitar conflictos. Por no decir, que el humo se extiende a su paso y abarca un espacio difícil de controlar.

Habrá que ver cómo evoluciona, aunque parece claro que no va a afectar en el hábito de consumo. Una preocupación del presidente es la regulación de los locales de shishas donde, desde su punto de vista, deberían tener una regulación distinta al tratarse de un hábito de ocio donde los bares que ofertan ese tipo de productos le dan un valor añadido al local.