SOCIEDAD

“La única guerra permitida a la especie humana: la guerra contra la extinción”

Loro Parque Fundación colabora con un proyecto en Brasil donde se ha salvado al periquito pechigrís de su desaparición inminente

Redacción digital

Madrid - Publicado el - Actualizado

3 min lectura

Loro Parque Fundación apoya técnica y financieramente el proyecto del periquito pechigrís (Pyrrhura griseipectus) de Brasil. Gracias a la fundación y a sus colaboradores se ha evitado la desaparición de esta especie en su medio natural.

El periquito pechigrís, originario de las montañas de Baturité, se encotnraba amenazado por las capturas furtivas para el mercado de mascotas y por la falta de lugares idóneos para la anidación. Sin embargo, la alianza entre Loro Parque Fundación y la organización AQUASIS ha potenciado la labor del reconocido biólogo Fabio Nunes y su equipo en la zona, donde han logrado contar más de 1000 pichones nacidos en nidos artificiales en los últimos años.

El director científico de Loro Parque Fundación, Rafael Zamora, habló en COPE CANARIAS de las especiales características de esta ave donde destacó que su canto es más agudo debido a su pequeño tamaño ya que “caben en la palma de una mano”. “Siempre los cantos de los más pequeños son más elaborados y su comunicación es más activa”. Zamora contó que en las instalaciones de Loro Parque cuentan con más de 60 periquitos de esta especie ya que el trabajo de reproducción ha sido bueno y “son capaces de sacar hasta cinco pichones de casa anidada”.

Reparación histórica

El biólogo de AQUASIS, Fabio Nunes, explicó que cuando la Fundación comenzó a trabajar para evitar la extinción de este periquito, “ni el gobierno brasileiro había hecho algo efectivo para proteger esta especie”. Nunes recalcó que en el momento en que comenzaron a recibir la ayuda de Loro Parque Fundación, el pechigrís “era el periquito más amenazado de las américas”.

En Brasil, el éxito de los nidos artificiales para mejorar su reproducción ha sido tal que cada año se observa un crecimiento en el número de pichones que salen de ellos con éxito, dándole más oportunidades de supervivencia. De hecho, el biólogo brasileño declaró con optimismo que de menos de 100 ejemplares cuando comenzaron con el proyecto se habían pasado a más de 1000 dándole otra oportunidad a la especie.

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Cría y huevos del pechigrís

Una de las maneras de observar y entender los hábitos de esta especie, poco conocida en el pasado, ha sido la presencia activa en campo, que ha permitido obtener una gran cantidad de información científica muy importante incluso para otros proyectos de similares características.

Además, las labores de marcaje han resultado fundamentales, porque permiten obtener datos de movimiento y distribución de los periquitos –a través de su anillamiento-, que son capaces de ocultarse muy bien entre la vegetación. También ha sido clave, en este proceso, la creación de espacios protegidos reconocidos por la población local.

Nunes no dudó en afirmar que este proyecto era una auténtica “reparación histórica contra las extinciones y ha demostrado que se puede salvar a una especie de la extinción. Solo hay una guerra permitida a la especie humana: la guerra contra la extinción”.

En total, la Fundación ha destinado, desde que comenzó a colaborar con este proyecto, 478. 000 dólares a la protección del periquito pechigrís, cambiando la categoría de la especie en la Lista Roja de las Especies Amenazadas de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) de “en peligro crítico” a “en peligro”. Siendo una de las 10 especies que la fundación ha logrado sacar de la inminente extinción.