El Éibar se lleva demasiado premio del Heliodoro

Se reencontró con el Heliodoro el CD Tenerife con otra buena entrada ante mmás de 12.000 espectadores.

Llegaba el conjunto blanquiazul después de caer en El Molinón, sabiéndo que por delante estaba el todopoderoso Éibar. Por si eso no era poco y unido a las lesiones mencionadas durante la semana, Kike Salas se lesionaba en el calentamiento y dejaba su puesto en el once, antes de comenzar, a José León.

Los blanquiazules quisieron tomar parte importante del partido, disfrutar de algo mas de posesión y minimizar el buen hacer del conjunto armero. Armado, precisamente, estaba el equipo de Ramis que iba dejando buenas sensaciones en los primeros compases de choque. Tuvo hasta tres acciones, en tres córners consecutivos, la mejor de ellas en el segundo, tras un remate de Nacho desde la frontal.

Con un Tenerife que estaba siendo mejor, llegaba el gol de los armeros. Balón que recogía Corpas en el área y tras un buen escorzo, ponía el balón al palo largo de Soriano, que nada pudo hacer para evitarlo. (0-1).

El Tenerife tuvo minutos de titubeo, tocado moralmente con el tanto del Éibar y casi sin ideas de sus hombres de ataque. Aún así, lo intentó Waldo Rubio desde la frontal en un gran disparo que rechazó Luca Zidane pero al que no llegó ningún jugador al rechace.

Se dieron dos minutos de descuento, que fueron dos mas, porque no se jugaron por un golpe de Soriano sobre Nolaskoain. Con el mencionado 0-1 llegamos al descanso.

No hubo movimientos en los banquillos para el comienzo de la segunda parte, donde se vio a un Tenerife que claramente iba a por el empate. Waldo Rubio lo tuvo, pero su disparo con toda la intención, fue enviado a córner por Luca Zidane.

El Tenerife le tuvo paciencia al partido, no encontraba huecos y no llegaba con claridad pero seguía en la línea del choque para buscar las ocasiones. Las mismas comenzaron a llegar y estuvo a punto de darle fruto al conjunto de Ramis pero Luca Zidane lo evitaba enviando a córner el remate de Waldo Rubio. El saque de esquina fue rematado en el área pequeña por José León, pero el guardameta volvió a evitar el empate.

Logró el gol el Tenerife en el minuto sesenta y tres, en un disparo de Garcés desde la frontal, pero el colegiado lo anuló por manos en la trayectoria del balón, de Corredera.

A pesar de que todo estaba en contra, el Tenerife continuó en el intento del empate del choque. Los cambios no le dieron demasiada vida al equipo, aunque pudo servirle para continuar en la tónica del partido. Los blanquiazules continuaron intentándolo hasta el final y mereció el empate en muchos tramos del partido, pero la falta de acierto ha vuelto a dejar de vacío a los blanquiazules en el Heliodoro.