Descontrol de la pandemia en Tenerife: "Hay que usar la mascarilla en la calle porque la situación es crítica"

El Boletín Oficial del Estado ya ha publicado la orden del Ministerio de Sanidad por la que se elimina desde mañana la obligatoriedad de usar mascarillas en la vía pública y en espacios al aire libre.

Se mantiene, no obstante, la obligatoriedad del uso de este elemento de protección al aire libre cuando se produzcan aglomeraciones y no se pueda mantener una distancia mínima de 1,5 metros de distancia entre personas, salvo grupos de convivientes.

También sigue siendo obligatorio su uso en los medios de transporte público, al igual que en los vehículos de hasta nueve plazas, incluido el conductor, si los ocupantes de los vehículos de turismo no conviven en el mismo domicilio.

Para evitar que esta circunstancia empeore los indicadores epidemiológicos de Tenerife y se produzca un mayor descontrol de la pandemia, el presidente de la Asociación para la Defensa de la Sanidad Pública, Guillermo de la Barreda, ha pedido a la población de la isla que siga utilizando la mascarilla mientras la curva de contagios no se reduzca de manera notable.

"Solo hay que observar a la gente por la calle. Habrá riesgo porque es imposible guardar la distancia al caminar por una acera con un ancho de dos metros. Además, el peligro aumentará cuando nos crucemos con gente que esté fumando. Es aceptable retirar la mascarilla en espacios exteriores en lugares con parámetros sanitarios aceptables, pero no es nuestro caso", ha lamentado en COPE.

En este mismo sentido, ha subrayado que, a su juicio, puede haber habido fallos en la gestión de la crisis sanitaria en los últimos meses.

"Los indicadores se dispararon desde principios de abril. Solo hay que mirar los datos para comprobar que casi la mitad de los días ha habido más de 80 positivos a diario. Si entonces se hubieran encendido las alarmas, no hubiéramos llegado a la actual situación. Y el problema es que, dada la evolución de la enfermedad, los resultados de las restricciones del nivel 3 no se verán hasta dentro de dos o tres semanas, por eso, habrá que esperar, como mínimo, hasta agosto para poder hablar de una relajación de las medidas de contención. En mi opinión, la normalidad del verano se ha acabado para nosotros con este escenario", ha zanjado.