ECONOMÍA
Desde Asuican califican la propuesta de Yolanda Díaz como "perjudicial para el consumidor e ilegal"
El secretario general de la Asociación de Supermercados de las Islas Canarias cree que un tope de precios "no tiene cabida en una economía de libre mercado"
Madrid - Publicado el - Actualizado
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Continúan produciéndose en Canarias reacciones contrarias a la propuesta de la ministra Yolanda Díaz, de poner un tope al precio de determinados productos básicos. Desde la Asociación de Supermercados de las Islas Canarias (ASUICAN), su secretario general Alonso Fernández ha querido dejar bien claro en el día de hoy que esta medida y los pactos con grandes empresas de distribución “no son legales, y no tienen cabida en una economía de libre mercado”.
En declaraciones a La Mañana de COPE Tenerife, y en la misma línea que otros agentes económicos, Fernández confesó que “no alcanzamos a entender esta propuesta, ni por qué se ha hecho y si hay un fin político detrás”
En cualquier caso, afirma que la legalidad de la propuesta viene impuesta “por la ley de competencia que no permite establecer pactos de precios porque eso perjudica gravemente al consumidor”.
Asimismo, “la ley de cadena agroalimentaria obliga a comprar por encima de costes de producción a los agricultores”, y por tanto “establecer precios topados para estos productos de alta variabilidad es perjudicar a todo el sector”.
Sin embargo, el dirigente empresarial mantiene que la principal causa del problema reside en el incremento de costes: “Intentar topar unos precios, cuando el costo de la materia prima en origen sigue al alza, con el aumento de costes de energía, es obligar a esas producciones a salir de la cadena, lo que conduce a escasez, cartillas de racionamiento, y no tiene sentido alguno”.
Cuestionado sobre las intenciones políticas de esta propuesta de la vicepresidenta y ministra de trabajo, Fernández concluyó que “lo que no nos cuadra es que el ministro de esa área, (en referencia a Luis Planas ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación) diga que esto no es posible, ni deseable por los efectos perniciosos que tendría, cuando es el pequeño de comercio de cercanía el que mantiene el tejido productivo de este país”.