Medio ambiente

“Qué pasará con nosotros si nos quitan nuestras casas”: los vecinos de Boca Cangrejo luchan por sobrevivir a la Ley de Costas

Los vecinos se unen para proteger sus hogares ante la incertidumbre legal

Bryan Estupiñán

Tenerife - Publicado el - Actualizado

2 min lectura

      
      
             
      

La situación de los vecinos de Boca Cangrejo sigue bajo la lupa de las autoridades locales y nacionales, con la amenaza de posibles demoliciones por parte de la Ley de Costas que se cierne sobre este núcleo costero. En recientes declaraciones, habitantes de la zona expresaron su preocupación y su deseo de regularizar su situación, ante el temor de perder sus hogares.

Durante la emisión de Herrera en COPE Canarias, Laia, residente del lugar, comentó que la incertidumbre es constante: "Siempre hay noticias en la televisión de órdenes de demolición y multas. Cuando quieres arreglar las humedades de tu casa o la fachada, te multan. Lo único que queremos es vivir tranquilos". La vecina, que vive en una casa construida en 1953, se enfrenta a numerosas dificultades debido a la falta de un planeamiento claro que proteja su hogar. Aunque afirma que utiliza productos ecológicos y cuida al máximo el entorno, la falta de alcantarillado en algunas viviendas agrava el problema. “Nos gustaría muchísimo que la situación mejore y todo se regularice”, agregó.

El alcalde del municipio de El Rosario, Escolástico Gil, ha manifestado en otras ocasiones su intención de buscar soluciones, pero los vecinos se sienten abandonados. Mercedes Ortega, otra residente, expresó su frustración en Herrera en COPE Tenerife: “No se puede hablar de derribar y ya está. Detrás de la palabra ‘demoler’ hay personas, hay familias e historias. Nosotros pagamos impuestos como cualquier otro vecino y llevamos décadas luchando por regularizar nuestra situación".

Para Mercedes, la clave está en que se entienda la importancia cultural e histórica de lugares como Boca Cangrejo: "Este pueblo tiene más de 100 años de historia y se ha construido con el esfuerzo de sus habitantes. ¿Por qué no se hace un esfuerzo por regularizarlo como en otras zonas de Canarias?", se pregunta. Asegura que los vecinos de Boca Cangrejo cuidan su entorno y abogan por un turismo sostenible y respetuoso, contrario al modelo masivo que ha afectado a otras localidades cercanas.

Lo único que pedimos es que nos cuiden como a cualquier otro pueblo, que podamos regularizar nuestras casas y tener la seguridad de que no vamos a ser expulsados”, concluye Mercedes. Los vecinos hacen un llamado a las autoridades para entablar un diálogo constructivo que permita la consolidación de Boca Cangrejo como un núcleo urbano con todos los derechos y garantías, sin temor a un futuro incierto.

Uno de los elementos que diferenciaban al pueblo eran las pintadas de corazones que cubrían el paseo de la playa, logrando que la localidad estuviera en boca de todos, no solo en el ámbito regional, sino también internacional. Esta iniciativa transformó el lugar en un destino atractivo para numerosos visitantes que llegaban motivados por ese singular arte urbano. Sin embargo, tras la reciente desaparición de los corazones al repintar el suelo, algunos turistas se van con la sensación de que falta algo. Aun así, gracias a esta propuesta, el pueblo consiguió ponerse en el mapa como un lugar de paso imprescindible.