De pescadores en Senegal a pescaderos en Canarias: la increíble historia de dos migrantes que llegaron en patera

Usman y Sidatil son dos jóvenes senegaleses que llegaron a Canarias hace cuatro años con el sueño de encontrar una vida mejor. Hoy ese sueño se ha convertido en una realidad. Trabajan como pescaderos en el Mercado de Nuestra Señora de África, en Santa Cruz de Tenerife, donde cada día preparan pescado con esmero y una sonrisa para los clientes.

En Senegal eran pescadores, conocían el mar, los barcos y el trabajo duro. Aquí han aprendido el otro lado del oficio: el trato directo con los clientes, los cortes, la limpieza y la preparación del pescado. Usman, de 28 años, lo cuenta con orgullo:

“Porque en Senegal yo era pescador también. Allí sabía limpiar pescado. Aquí es diferente, porque la gente te pide pescado de muchas maneras: para freír, para guisar, para horno…  Ha explicado el joven en los micrófonos de Herrera en COPE Canarias. Al principio fue un poco complicado, pero al final todo salió bien porque tengo un jefe maravilloso y estoy supercontento de trabajar con él.”

En Senegal yo era pescador también. Allí sabía limpiar pescado. Aquí es diferente, porque la gente te pide pescado de muchas maneras"

Usman joven senegalés pescadero

 De querer salir, a querer quedarse para siempre  

Cuando Usman llegó a Tenerife, su idea era continuar camino hacia otro país europeo. Tenía familia en Madrid, Barcelona y Francia, pero su vida dio un giro inesperado gracias a una familia que lo acogió en la isla.

“Ahora tengo padre, madre, abuela aquí. Viví con ellos dos años. Me apoyaron y me ayudaron muchísimo con mi formación”, explica agradecido. Tanto es así que ahora asegura que su deseo es quedarse y jubilarse en Tenerife.

Ahora tengo padre, madre, abuela aquí. Viví con ellos dos años. Me apoyaron y me ayudaron muchísimo con mi formación

Usman joven senegalés pescadero

 Una nueva vida compartida  

Su compañero y amigo Sidatil también llegó hace cuatro años, poco antes que Usman. Aunque fue él quien pisó primero, tierra canaria, fue Usman quien encontró trabajo antes. Hoy viven juntos y comparten techo, amistad y trabajo. “Estoy trabajando aquí muy feliz. La verdad que la gente de la isla es maravillosa, nos tratan bien”, afirma Sidatil.

Estoy trabajando aquí muy feliz. La verdad que la gente de la isla es maravillosa, nos tratan bien"

Usman joven senegalés pescadero

Ambos jóvenes comparten no solo un empleo, sino también la ilusión de un futuro mejor. Aprenden un oficio que les da estabilidad y les permite ayudar a sus familias en Senegal. Lo que comenzó como un viaje lleno de incertidumbre, hoy es una historia de integración, trabajo y esperanza.