Así es la alarmante enfermedad que sufren cada vez más autónomos en Cantabria: "Pandemia silenciosa"
Estas dolencias no solo afectan la vida personal de los autónomos, sino que también impactan negativamente en su capacidad para trabajar
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En el tejido económico de Cantabria, los autónomos juegan un papel crucial, representando aproximadamente un 10% del Producto Interior Bruto (PIB) regional. Sin embargo, un reciente estudio realizado por la Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos (UPTA) ha arrojado cifras preocupantes sobre la salud mental de este colectivo en la región.
Según los datos recopilados por UPTA, más de un centenar de autónomos cántabros estuvieron de baja en 2023 debido a patologías relacionadas con la salud mental. Esta cifra, aunque alarmante por sí sola, revela una tendencia preocupante que la UPTA ha calificado como una "pandemia silenciosa".
Eduardo Abad, presidente de UPTA, en una reciente entrevista realizada por COPE Cantabria, destacó la importancia de abordar este problema de manera urgente. Abad subrayó que los autónomos representan una parte significativa del tejido económico de la región y que su salud mental es fundamental para el buen funcionamiento de la economía local.
Entre las causas identificadas por el estudio de UPTA para estas bajas relacionadas con la salud mental se encuentran el estrés derivado de largas jornadas laborales, la acumulación de deudas, la inseguridad laboral y la frustración ante la posibilidad de cierre del negocio. Además, las condiciones laborales impuestas por las empresas contratantes de los servicios autónomos también contribuyen a este problema.
Las consecuencias de este desequilibrio en el bienestar mental son variadas y preocupantes. Desde trastornos del sueño y ansiedad hasta depresión en diferentes niveles, pasando por pensamientos rumiantes y, en casos más graves, comportamientos suicidas. Estas dolencias no solo afectan la vida personal de los autónomos, sino que también impactan negativamente en su capacidad para trabajar y contribuir al desarrollo económico de la región.
Ante esta situación, UPTA ha lanzado un llamado de atención a las autoridades competentes para que tomen medidas urgentes. La organización solicita la ampliación de los servicios de atención psiquiátrica y psicológica por parte de las Mutuas de Accidentes de Trabajo. Asimismo, insta al Ministerio de Trabajo y Economía Social, a través de los Institutos Regionales de Seguridad y Salud en el Trabajo, a emprender una campaña de concienciación sobre estas dolencias y la importancia de abordarlas de manera integral.
En la entrevista con COPE Cantabria, Eduardo Abad hizo hincapié en que el bienestar mental de los autónomos no solo es una cuestión humanitaria, sino también económica. Si el colectivo de autónomos se ve afectado por problemas de salud mental de manera generalizada, esto podría tener consecuencias devastadoras para el tejido económico de Cantabria.
En resumen, el estudio realizado por UPTA pone de relieve la urgente necesidad de abordar las dificultades de salud mental entre los autónomos cántabros. Con el apoyo de las autoridades y una mayor concienciación en la sociedad, se espera poder mitigar este problema y garantizar un entorno laboral más saludable y sostenible para todos los trabajadores autónomos de la región.