Protones contra el cáncer

Tanto el beneficio como el resultado es clarísimo y el paciente ni lo nota

Katia Nogueira Pi

Santander - Publicado el - Actualizado

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La Protonterapia supone un avance en el tratamiento de algunos tipos de cáncer, sobre todo es muy beneficioso para los cánceres de próstata, pulmón u ojos.

Es una técnica no invasiva que tiene grandes beneficios para el paciente, "nos permite tratar ciertos tumores con una técnica basada en la interacción de protones con el cuerpo, con el tumor. Disparamos una partícula de diferentes características y los protones nos permite tener mucha más definición a la hora de depositar la dosis y a la hora de hacerle daño al tumor", explica a Cope el radio físico, Samuel Ruiz.

En Cantabria su instalación supondrá una inversión de 20 millones de euros y es que esta técnica necesita una instalación muy potente. La propia tecnología requiere unas dimensiones, unos sistemas que son considerables. "La estructura es bastante voluminosa y los tratamientos con Protonterapia requiere de un Bunquer de grandes características. Es una instalación con bloques de hormigón muy grande para evitar fugas de radiación al exterior", asegura Ruiz, quien también explica que toda la instalación también es necesaria para confinar el tratamiento y que el beneficio sea máximo para el paciente y no perjudicial para el personal que trabaja cercano a él.

La radiación con protones minimiza los efectos secundarios a corto y largo plazo en niños con cáncer, según una experta

Programación del tratamiento con protonterapia de un paciente oncopediátrico.

¿LA PROTONTERAPIA ES SEGURA?

Según Samuel Ruiz, es totalmente seguro. Se trata de un tratamiento como cualquier otro que tiene sus ventajas e inconvenientes, pero que se compensan y el resultado es completo para el paciente, "el beneficio es clarísimo"

Además, la forma de realizar la técnica es muy sencilla para el paciente. "La sala es parecida a la que ves cuando entras hacerte una Resonancia Magnética. Hay una mesa en la que te tumbas y no ves nada. En el techo hay como un sistema con un televisor que gira en torno al paciente. Toda la estructura giratoria no se ve, sino que está en una segunda habitación", explica Samuel.

En definitiva, una habitación con una mesa agradable y donde el paciente no siente ningún tipo de sensación, lo único el ruido de la máquina al moverse.