Golpe policial al crimen organizado: cae una banda acusada de cometer 150 atracos, 39 en Cantabria
Los cabecillas han sido arrestados en el aeropuerto de Barcelona cuando intentaban huir del país. En total hay 11 detenidos
Santander - Publicado el - Actualizado
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La Guardia Civil ha detenido a once integrantes de un grupo criminal por cometer casi 150 asaltos en chalets y casas unifamiliares del norte de España. En Cantabria se les imputan 39 robos en localidades de siete municipios. En concreto, en Castro Urdiales, Hinojedo (Suances), Villaescusa, Revilla de Camargo (Camargo), Oruña de Piélagos (Piélagos), Liaño (Villaescusa), Puente Arce (Piélagos), Beranga (Hazas de Cesto) y Santiurde de Toranzo.
El grupo criminal, especializado en asaltar viviendas en zonas rurales aisladas, tenía su sede en Barcelona, desde donde planificaban los robos, al menos 145 cometidos en Aragón, La Rioja, Castilla y León, Cantabria, Asturias y Galicia. Los dos principales líderes han sido detenidos en el aeropuerto de El Prat cuando intentaban huir del país.
La operación, denominada 'Volcado', ha permitido desarticular esta organización experta en el robo de joyas, dinero y objetos de valor. Se han incautado y recuperado numerosos efectos por valor de 600.000 euros, así como un dispositivo electrónico que usaban para evitar que ladrasen los perros de las viviendas, una piedra de toque con reactivos para comprobar la calidad del oro y un detector de diamantes.
Los autores, residentes en Barcelona, hacían largos desplazamientos desde su domicilio a poblaciones situadas a 300 o 400 kilómetros de distancia. Cometían tres o cuatro asaltos en viviendas cada jornada, se desplazaban entre provincias durante varios días seguidos y regresaban a Barcelona. Actuaban en horario de tarde o noche, forzando puertas o ventanas de viviendas y desvalijándolas en pocos minutos. Su objetivo principal eran joyas y dinero en efectivo, aunque también sustraían teléfonos, relojes u objetos de valor.
Estas personas se dividían en dos grupos, uno operativo y otro de apoyo logístico. Realizaban continuos cambios de vehículos y relevos entre las personas que cometían los robos para evitar ser rastreados y dificultar las labores de investigación.
Paralelamente, al grupo operativo actuaban otras personas que aportaban apoyo logístico, lo que permitía ocultarse a los autores materiales de los robos. Este apoyo consistía en proporcionar vehículos, alojamiento o móviles para conseguir el mayor anonimato posible.
A pesar de todos los intentos, los agentes consiguieron trazar una cronología de los robos que iban cometiendo y descubrir el modus operandi y rol específico de cada uno dentro de la organización criminal.
En total, hay once detenidos y nueve investigados por cometer al menos 145 delitos de robo. Además, están siendo investigados por pertenencia a organización criminal. El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción n.º 2 de Huesca dirige la investigación y ha decretado el ingreso en prisión provisional de cuatro de los detenidos, quedando el resto en libertad con cargos.